Televisión y Mas

Un par de sinvergüenzas

Un par de sinvergüenzas

Sergi Mas

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En la noche del lunes pudimos ver el primer capítulo de la nueva temporada de “El consultorio de Berto” que emite Movistar Plus y que presenta y dirige Berto Romero. Hasta aquí, todo correcto.

En televisión todo o casi todo es mitad verdad y mitad mentira, aunque en el fondo resulta indiferente (o inverosímil, como hace años dijo equivocadamente un futbolista) porque el objetivo siempre es LA RISA. Así que empezó Berto quejándose de que una buena parte de los mensajes de voz que recibe en su consultorio empiezan saludando a Andreu Buenafuente, recordando la sección que el de Cardona hizo en el programa que presentaba el de Reus. Hasta aquí, todo correcto.

Entonces apareció el primer invitado del programa y de la temporada, que no fue otro que… ¡Alehop: Andreu Buenafuente! Ambos de oscuro y ubicados en un pequeño plató, porque en la realidad los platós siempre son mucho más pequeños de como los vemos a través de la pantalla. Siempre.

Y a mi gusta ese espacio que aguanta bien a los actores como si fuera un bar semi vacío a punto de cerrar. Hasta Andreu se refirió “al circo pequeño que te has montado” al comentar ese decorado circular, semi taurino y que me recordaba la primera época de los payasos de la tele. Bien, hasta aquí todo correcto. 

Aparecieron unos taburetes por parte de un colaborador de Berto que curiosamente se llama Andrés: ¿Es un actor? ¿Es una persona de atrezzo haciendo de actor? ¿Es una persona de atrezzo que tiene libertad absoluta para trabajar sin guion? Qué más da. A menudo la magia de la tele (que sí, que existe) radica en que como espectador no conviene que sepamos la verdad. Cuando se emitía “Malalts de tele” en TV3, a finales de los 90, ¿se acuerdan ustedes el debate que existía en la calle sobre si Toni Soler y Rosa Andreu eran pareja en la vida real? ¡Suerte que no había Twitter!

Así que, con dos taburetes como testigos, Andreu y Berto dialogan, pasean, se detienen de golpe (mi solidaridad con el realizador Víctor Català) se divierten y lo transmiten. Y cuando el programa acaba, se ordena el universo: el guión es de Berto Romero, Rafael Barceló y Julia Cot, el audio creativo es de Ramón Juncosa y la producción de Rosa Domingo. Todo correcto para que dos personas sin vergüenza sigan haciéndonos pasar un buen rato. Hasta el propio Berto se llevó los taburetes del plató. Y pensé: 38 minutos de programa: todo correcto.