Los Mossos advierten del incremento de denuncias de agresión sexual por tocamientos en Girona

Los Mossos d'Esquadra han detectado un incremento de denuncias por delitos de agresión sexual por tocamientos en zonas de ocio nocturno de las comarcas de Girona este verano. Según datos del cuerpo, los meses de junio y julio hubo 109 denuncias, con una gran incidencia de mujeres que habían sufrido tocamientos por parte de hombres cuando estaban de fiesta.

Desde el Área Regional de Atención a la Víctima y el Ciudadano señalan que uno de los puntos donde han detectado más comportamientos de este tipo está en las fiestas mayores y en los espacios donde se acumulan grandes concentraciones de personas.

Una mayor concienciación

Los Mossos d'Esquadra dejan claro que no quiere decir que haya más hechos delictivos que antes, sino que hay una mayor concienciación y que las mujeres han perdido el miedo a denunciar la violencia sexual. A modo de ejemplo, en una semana se registraron tres denuncias en tres localidades del Baix Empordà por tocamientos. Una en Palamós, otra en el Estartit y una última en la fiesta mayor de Rupià.

"Lo primero que tenemos que conseguir es que la víctima se dé cuenta de que no es culpable. El problema es que en muchos casos creen que quizás han dado pie a que se cometiera el delito", señala la agente. En este sentido, desde los Mossos señalan que "es importante" denunciar para que la persona "no se quede con el trauma". Lo que "tenemos que hacer es cambiar el concepto de víctima a superviviente", destaca Sara.

Desde los Mossos destacan que el trabajo que se va haciendo en los centros educativos y en las entidades lo que se quiere es que la ciudadanía sea consciente que una agresión sexual no tiene por qué comportar una violación. "Si te tocan el culo sin permiso o si quieren ir más allá y la mujer no quiere, esto también es violencia machista", destaca

Los puntos lilas, clave

Una de las acciones que más ha ayudado a detectar violencias machistas son los puntos lilas, cada vez más presentes en fiestas mayores y espacios de ocio nocturnos donde se acumula una gran cantidad de personas.

"Animamos a las víctimas o a quien se quiera informar ir a estos puntos porque encontrará acompañamiento de profesionales y, si se da el caso que ha habido algún tipo de agresión, tienen el contacto directo con la policía", señala la regidora del Ajuntament de Girona, Amy Sabaly. Además, explica que lo más importante es que las mujeres que hayan sido víctimas se puedan acercar a los puntos lilas sin sufrir por sí serán enjuiciadas por lo que les ha pasado.

"Sentirse seguras"

Una de las principales preocupaciones para las personas que atienden a las víctimas es conseguir que el espacio donde las reciben transmita que es un lugar donde ellas "se sientan seguras". En este sentido, la psicóloga Meritxell Perich del centro joven de Salud de la plaza de Sant Pere de Girona explica que pueden volver "las veces que haga falta" y puedan expresar el que sienten, además de recibir el asesoramiento sobre el que pueden hacer.

Perich también explica que en muchas ocasiones acaban detectando que una mujer ha sido víctima de una agresión, pero "no era consciente". "Nos encontramos que algunas víctimas vienen por otros motivos y una vez hablamos con ellas detectamos que han sufrido un episodio de agresión sexual", remarca.