Una patrullera de la Guardia Civil arrolla a una patera para evitar que llegue a Melilla

Una patrullera de la Guardia Civil arrolló el pasado domingo a una embarcación con cuatro inmigrantes, que pretendían entrar ilegalmente en Melilla, con una peligrosa maniobra en la que pasó por encima del bote. La Guardia Civil y la Delegación del Gobierno en Melilla han asegurado este lunes que la maniobra de la patrullera no causó heridos ni víctimas mortales, como se especuló en un primer momento.

La actuación tuvo lugar frente a la playa de Horcas Coloradas, donde la patrullera abortó el intento de entrada de cuatro migrantes, a los que embistió, lo que provocó que cayeran al agua, como se ha podido ver en un vídeo que ha circulado por redes sociales. Los navegantes fueron atendidos en ese mismo momento, según han indicado fuentes de la Guardia Civil consultadas por EFE.

También la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) de Nador ha emitido en la noche de este lunes un nuevo comunicado en el que informa de que las autoridades de su país les han confirmado que no se ha registrado la muerte de ninguna persona durante esa actuación de la Guardia Civil. La ONG marroquí, que había pedido una investigación sobre el suceso, ha añadido que según esa fuente, concretamente la gendarmería marítima de Beni-Enzar, "los cuatro migrantes a bordo están a salvo y bajo arresto".

La AMDH, que había sostenido que uno de los migrantes había muerto, ha detallado que el cadáver llevado al Hospital Hassaní (Nador) este lunes no es como consecuencia de la intervención de la Guardia Civil, como se llegaron a plantear en un principio, sino que se trata de otro migrante de Kenitra que "fue encontrado muerto en el lado de Bocana", la playa marroquí más próxima a Melilla por su zona sur. "Su familia estuvo hoy en Nador e hizo el procedimiento de identificación" han admitido.

Esta es la segunda patera que alcanza Melilla en apenas 48 horas. Una zodiac con once inmigrantes de origen magrebí, de ellos cinco menores de edad y cinco mujeres, consiguió llegar la tarde del viernes a aguas de Melilla procedente de las cercanas costas de Marruecos.