Meteorología

No es calima: el humo de los incendios de Canadá enturbia el cielo de la Catalunya central

El ambiente brumoso que comenzó este lunes procede de las partículas que llegan desde el país estadounidense

El cielo de Llívia, esta mañana.

El cielo de Llívia, esta mañana. / Regió 7

Alba Díaz

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La Catalunya central ha empezado la semana con cielos algo enturbiados y el sol amortiguado, como si no acabara de lucir pese a la ausencia de nubes. Este fenómeno ha sido interpretado como calima o neblina por muchos usuarios en las redes sociales. Sin embargo, el Meteocat ha informado de que se trata del humo procedente de los incendios de Canadá, que también ha causado que las salidas y puestas de sol hayan sido más rojizas.

El humo de los incendios se ha percibido en muchos puntos de la región, sobre todo en la Cerdanya y el Berguedà. Un usuario en X (antes Twitter) ha compartido una panorámica de la zona del Carlit, en la Cerdanya, donde es visible esta capa de humo que ha llegado hasta territorio catalán. También se han compartido imágenes de Puigcerdà, donde este martes el cielo ha arrancado, por segundo día consecutivo, enturbiado a causa del humo.

De hecho, una de las zonas del Estado más afectadas por este ambiente turbio son las del noreste del país. Navarra, Aragón y Catalunya, así como el norte de la Comunidad Valenciana y las Islas Baleares, serán las zonas donde más se note la presencia del humo procedente de Canadá.

428 incendios

Durante este mes de agosto se han originado más de 428 incendios forestales activos en Canadá, según el Servicio de Incendios Forestales de Columbia Británica. De hecho, el humo de estos incendios afectó de forma notable a las ciudades de Nueva York y Nueva Jersey, en Estados Unidos, que se cubrieron de una misteriosa neblina por esta causa.

Pero ese humo ha traspasado las fronteras americanas y ha cruzado incluso el Atlántico, dirigiéndose a Europa. La circulación atmosférica, que distribuye el calor y la humedad por todo el planeta, ayudó a la dispersión de ese humo de los incendios forestales.

Estas corrientes atmosféricas en las capas medias y altas son las que han provocado que lleguen a Catalunya las partículas procedentes de los graves siniestros forestales que están arrasando Canadá. El efecto que tiene este fenómeno sobre nuestro cielo es muy similar al que causaría la calima, por lo que se puede confundir con ella.

Sin embargo, las concentraciones de partículas no parecen constituir en este caso ningún peligro y, por tanto, no afectan a la calidad del aire.