El incendio forestal en Teruel evoluciona de forma "favorable" tras quemar casi 300 hectáreas

Los equipos de extinción del incendio forestal declarado este domingo en el término municipal de Corbalán (Teruel) están muy safisfechos por el trabajo que se ha realizado durante la noche para controlar las llamas, que han afectado a un mínimo de 300 hectáreas. El jefe de extinción, Carmelo Peralta, ha destacado a primera hora de este lunes cómo la tarea de los buldócer ha sido esencial en las últimas horas. "Se ha hecho un trabajo muy bueno durante la noche, sobre todo en el flanco izquierdo", ha explicado Peralta. El flanco derecho es más complicado por razones de orografía. La "carga de combustible" en la cabeza del flanco derecho es muy "elevada", ha destacado el jefe de extinción.

Los medios aéros, de nuevo activados con la luz del día, se antojan esenciales para porder controlar este nuevo siniestro forestal, especialmente en su flanco izquierdo. Además de los medios del Gobierno de Aragón (7 cuadrillas terrestres, 6 autobombas, un helicóptero M2 y la brigada helitransportada y un helicóptero de coordinación), están desplegados en la zona efectivos de la Unidad Militar de Montaña (UME) y Bomberos de la Diputación Provincial de Teruel (DPT) y la BRIF con sede en la localidad soriana de Lubia.

El fuego obligó el domingo a confinar durante dos horas a los vecinos de Corbalán, una pequeña localidad turolense ubicada a 15 kilómetros de la capital provincial. Las llamas se expandieron con rapidez, lo que llevó a movilizar un importante operativo de contención con una decena de medio aéreos y varias brigadas terrestres. A última hora de ayer, el fuego evolucionaba de "forma favorable" gracias a que el viento amainó por la noche y las temperaturas bajaron de forma coniderable. 

El fuego se produjo "en un lugar muy complicado, con mucha masa arbolada", lo que requirió un importante despliegue de medios para frenar su avance por el flanco izquierdo, el más próximo a la localidad turolense. "Aun así, todo ha ido dentro de lo previsible. El incendio va mejor que hace unas horas pero queda mucho trabajo por hacer", señaló anoche el director general de Interior, Miguel Ángel Clavero, tras la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrada (Cecopi).

Clavero señaló que los equipos desplegados en el terreno anoche se centranban en atacar el flanco derecho, pues de lograr frenarlo el incendio podría tender hacia una estabilización, si bien avanzó que se tardará en lograr este objetivo. El director general también señaló que los equipos desplegados en el terreno anoche "eran suficientes".

Las perspectivas positivas dejaron casi descartada la evacuación del municipio "salvo un cambio importante" de las circunstancias, como reconoció la directora general de Gestión Forestal del Gobierno de Aragón, Ana Oliván, desplazada hasta el Puesto de Mando Avanzado que se instaló junto al cementerio de la localidad.

El incendio se originó sobre las 13.19 horas en una zona de monte poblada de pinos en el término municipal de Corbalán y obligó a cortar la carretera A-226. Las rachas de viento y la sequedad del terreno complicaron la evolución del fuego, lo que motivó un importante despliegue de efectivos para detener su avance. El Gobierno aragonés movilizó tres brigadas helitransportadas (Teruel, Calamocha, Alcorisa), siete brigadas terrestres, seis autobombas, dos bulldozer, para limpiar los caminos y siete técnicos, mientras que el Ministerio de Transición Ecológica ha movilizado tres aviones anfibios (un FOCA y 2 AT) y a las Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) de Cuenca y Daroca. Además, la Unidad Militar de Emergencias (UME) se desplazó hasta el terreno y los bomberos de la Diputación Provincial de Teruel se encargaron de proteger a los vecinos y el núcleo urbano.

Debido a la evolución del fuego, el Gobierno de Aragón activó la situación operativa 2 de la fase de emergencia del Plan Especial de Protección Civil de Emergencias por Incendios Forestales (Procinfo), además de movilizar un vehículo de Puesto de Mando Avanzado (PMA) que se ubicó junto al cementerio de Corbalán. 

De hecho, esa rápida evolución puso en alerta a los municipios de alrededor, como Alfambra o Cedrillas. «La situación cambia según el viento que sopla y dependiendo de las rachas nos van diciendo una cosa u otra. Yo he cogido un camión cisterna que tengo para los purines, lo hemos llenado de agua de un pozo y nos hemos bajado a Corbalán», señaló a este diario Javier Gómez, alcalde de Cedrillas, una localidad cercana situada a 15 kilómetros, y ganadero de profesión.

Según confirmó el responsable de Interior, la cabeza del incendio avanzaba hacia zonas despobladas, por lo que el riesgo sobre núcleos urbanos no era severo al cierre de esta edición.