Verano en Catalunya

Los cruceristas disparan los viajeros del Bus Turístic de Barcelona

El servicio pasó de 2,9 millones de usuarios en 2022 a 3,7 el año pasado

Un día en el Bus Turístic: “Montjuïc está de moda ahora"

Vecinos y trabajadores del bus piden "informadores" en las líneas cargadas de turistas en Barcelona

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Germán González

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Los visitantes que únicamente estarán unas horas en Barcelona, como los que vienen en cruceros, tienen poco tiempo para conocer la ciudad. Hay numerosas atracciones turísticas, más allá de la Sagrada Familia o del Camp Nou, que son atractivas para el público, pese a que no siempre se tiene en cuenta las distancias para recorrerlas.

Por eso, el servicio del Bus Turístic permite un recorrido guiado por los principales monumentos de la ciudad en unas dos horas, según el trayecto. Y por eso es uno de los más demandados cada año por los visitantes que llegan a Barcelona, aunque también tiene su público local en momentos muy concretos como son las rutas nocturnas o la especial para ver las luces de Navidad.

Según datos de Transports Metropolitants de Barcelona (TMB), el pasado 2023 el Bus Turístic tuvo 3,74 millones de viajeros, una cifra muy superior a los 2,95 millones de 2022. En lo que llevamos de 2024, supera el 1,5 millones de pasajeros.

De un año a otro se mantienen aproximadamente el número de autobuses que dan servicio, 65, a las dos rutas, la roja y la azul, que pasan por la Sagrada Família, el Park Güell, La Pedrera, el Camp Nou, La Rambla, Montjuïc o el Recinto Modernista de Sant Pau, entre otros.

La intención de TMB es descongestionar de visitantes el centro de la ciudad ofreciendo puntos de interés diversificados por toda Barcelona y por eso los autobuses turísticos recorren amplias zonas de la capital catalana. El año pasado la ruta azul tenía 19,1 kilómetros de recorrido mientras que la roja, que va hacia el Port Vell pasando por Montjuïc, unos 24,3 kilómetros. En las paradas, informadores atienden preguntas relacionadas con la cultura, el deporte, la ciencia o el ocio que se puede hacer en la ciudad.

La parada principal de las dos rutas está en plaza Catalunya y allí se forman las colas para subirse a los autobuses. Parten hacia los destinos turísticos y en el recorrido se pueden escuchar explicaciones con una audioguía en 16 idiomas. Al llegar a cada una de las paradas, el viajero se puede bajar a recorrer la zona a pie o entrar en un museo y esperar al próximo Bus Turístic que únicamente tarda unos minutos en pasar. El billete permite entrar y subir varias veces en 24 y 48 horas, depende de las tarifas. 

Precisamente, esta movilidad es muy demandada por los visitantes que pasan pocos días en la ciudad, como es el caso de los cruceristas, que suben desde el puerto por La Rambla hasta la parada de plaza Catalunya y allí pueden usar estos autobuses para conocer Barcelona de una forma rápida. En los últimos años se ha constatado que muchos de los usuarios de este servicio provienen de estos cruceros, según han explicado desde TMB a este medio.

Los viajeros pueden ir en la parte descubierta del bus o en la parte inferior que tiene vistas panorámicas. También se les entrega un mapa para que puedan hacer recorridos, unos auriculares para la audioguía y descuentos para locales de ocio de la ciudad.

Víctor llevando el Bus Turistic

Víctor llevando el Bus Turistic / Jordi Otix

"Preguntan mucho, bastante", ha explicado a este medio la Informadora del Bus Turístic Anna Maria Morera como por ejemplo "¿dónde hay restaurantes buenos?". O si vienen con niños, "¿dónde me puedo bajar para tenerlos entretenidos?”. También preguntas más clásicas, especialmente por la obra de Antoni Gaudí.

El conductor de Bus Turístic Víctor Rovira remarca que "hay mucha gente que viaja y no sabe apenas dónde va" cuando llega a un lugar, por lo que este servicio "es una manera más o menos organizada" de recorrer Barcelona pasando por sus principales atractivos turísticos.

Pese a que este transporte es utilizado en su mayoría por turistas tiene dos rutas específicas en las que se pueden encontrar más usuarios locales. Una es la Barcelona Night Tour Bus en la que se realiza un paseo nocturno en autobús desde plaza de Catalunya para descubrir iluminados los edificios más importantes de la ciudad, como la Casa Batlló, la Pedrera, la Sagrada Família, el monumento a Colón, la Torre Glòries o el Arc de Triomf, entre otros.

Luego está la Barcelona Christmas Tour en Navidad en la que se recorren estos monumentos iluminados y decorados además de las calles engalanadas para esas fiestas y que se adereza al son de los villancicos dentro del autobús. Representantes del servicio explican que muchas familias locales repiten cada año e, incluso, vienen ataviadas con gorros de Navidad, por lo que "se ha convertido en una tradición, en la que traen hasta a la abuela".

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