Detenida en Lleida la jefa de una red criminal en Ecuador cuando tramitaba su boda con un ciudadano español

La Policía Nacional detuvo el pasado 30 de julio en Lleida a Mercedes Leonor Villarreal, de 55 años, exdirectora del Consejo de la Judicatura en Guayas (Ecuador) y acusada de delincuencia organizada. Presuntamente, la sospechosa habría archivado varios sumarios disciplinarios en contra de jueces que habrían emitido resoluciones judiciales a favor de delincuentes.

La Fiscalía General del Estado investiga el llamado 'caso Purga' por presunta corrupción en el sistema judicial de Guayas. Mercedes Villareal escapó a principios de marzo de su país justo cuando se iban a producir detenciones por esta investigación, como la del exasambleísta socialcristiano Pablo Muentes, quien permanece en prisión provisional. 

Los investigadores creen que Villareal presuntamente valiéndose de su cargo como coordinadora de la Unidad Provincial de Gestión Procesal del Consejo de la Judicatura de Guayas archivó varios sumarios disciplinarios en contra de jueces que habían fallado a favor de los intereses de Muentes y de varios delincuentes, algunos relacionados con el narcotráfico. Villarreal tenía poder de decisión sobre estos expedientes al ser directora en el ámbito de Control Disciplinario en la provincia.

Hace unos días, la Policía de Ecuador anunció la detención de Villarreal en España, gracias a la colaboración con Interpol y la Policía Nacional, y que sería extraditada a su país. Los agentes explicaron que la acusada huyó de Ecuador el pasado 3 de marzo y que está "investigada por el delito de delincuencia organizada", ya que en el "interior de la Corte Provincial del Guayas, gestionaba de manera ilícita la obtención de beneficios en resoluciones judiciales a favor de organizaciones criminales".

Aseguran que Villarreal salió con destino a Países Bajos y de ahí se trasladó a España, en concreto a la provincia de Lleida. Allí la encontró la Policía Nacional, ya que tenía en vigor una orden de extradición. "La función de la detenida era infiltrar a miembros de la estructura criminal en el sistema de justicia en Guayas (Ecuador) para obtener sentencias favorables a los líderes de esa organización y que fueran inmunes a sanciones administrativas garantizándose así el control de la función judicial en esa provincia", según la Policía española.

Además, añaden que "esos movimientos administrativos buscaban garantizar las resoluciones judiciales a favor de los intereses de la estructura criminal y que se archivaran los sumarios administrativos". Todos los miembros de la banda fueron detenidos en Ecuador menos la sospechosa que escapó antes.

La Policía Nacional ha señalado que se localizó a la sospechosa cuando pretendía casarse y se la pudo detener. En concreto, las autoridades ecuatorianas aseguran que "por medio de la identificación de la fecha de la cita" para el enlace, la Unidad de Fugitivos de la Oficina Central Nacional de Madrid de la Policía identificó a la prófuga y por eso se la consigue arrestar.

Además, creen que la sospechosa pudo iniciar la tramitación del enlace matrimonial para evitar o dificultar su extradición a su país. La Audiencia Nacional debe decidir sobre su traslado a Ecuador para ser procesada por los delitos que se le imputan.