Crisis climática

El aumento de las temperaturas multiplica la proliferación de garrapatas en España

El cambio climático está acelerando el ciclo de vida de estos insectos, facilitando su expansión hacia zonas más frías y provocando que haya especies que sobrevivan todo el año

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Aumento exponencial de garrapatas en España

Aumento exponencial de garrapatas en España

Valentina Raffio

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Cada vez hay más garrapatas en España. Los entomólogos afirman que, por un lado, la población de estos insectos está aumentando y, por el otro, que cada vez se detectan más especies distintas. Las empresas de control de plagas también corroboran que cada vez se están realizando más intervenciones. Y los centros de salud y hospitales, por su parte, confirman un aumento de las consultas relacionadas con la picadura de garrapatas o con enfermedades transmitidas por estos insectos como, por ejemplo, los casos de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo. Según explican los expertos, buena parte del 'boom' de garrapatas en España se explica por el aumento de temperaturas derivado del cambio climático. "Es el caldo de cultivo perfecto para que proliferen algunas especies", afirma Carlos Pradera, especialista en control de plagas urbanas.

El cambio climático provoca que ciertas especies se desplacen hacia el norte y colonicen regiones donde antes ni siquiera se detectaban

En estos momentos hay al menos seis especies de garrapatas 'comunes' que proliferan en España y al menos una decena más de especies invasoras que, en muchos casos, todavía no se recogen en los catálogos oficiales. Algunas de ellas, como las 'Ixodes ricinus' y las 'Dermacentor reticulatus', prosperan en zonas húmedas y boscosas mientras que otras, como las 'Hyalomma marginatum' y 'Rhipicephalus sanguineus', suelen proliferar más en climas secos y cálidos.

"El problema no es la picadura en sí de una garrapata sino saber si el animal estaba infectado con algún virus o bacteria y si esto puede provocar una enfermedad"

Antoni Trilla

— Epidemiólogo

En los últimos años, según advierten varios estudios, se está observando un aumento en el número de garrapatas en gran parte de la Península Ibérica y, sobre todo, varios cambios en cuanto a su distribución. Por ejemplo, según un estudio del Instituto de Salud Carlos III, hay especies que se están desplazando hacia el norte y 'colonizando' regiones donde hasta ahora apenas se habían detectado. Y otras muchas que están apareciendo hasta un mes antes lo habitual.

Ciclo de vida acelerado

El aumento generalizado de las temperaturas en España, la llegada de inviernos cada vez más cortos y suaves y la expansión del calor veraniego hacia otras estaciones como la primavera y el otoño se han convertido en el "caldo de cultivo perfecto" para que estos insectos proliferen con más rapidez. Y es que, según señalan varios estudios, las altas temperaturas están "acelerando el ciclo de vida" de estos insectos, favorecen su reproducción y reducen el tiempo que los huevos necesitan para eclosionar. También se ha visto que la aparición de inviernos más suaves está aumentando la supervivencia de varias especies de garrapatas durante todo el año y hasta está propiciando su expansión hacia regiones donde tradicionalmente no solían verse.

Además del cambio climático, el aumento de fauna salvaje y el abandono rural están favoreciendo la expansión de estos insectos

"El cambio climático es uno de los factores detrás de la expansión de las garrapatas en España pero no es el único", matiza Pradera, jefe de Servicios del Área Técnica en Anticimex, quien también apunta a cuestiones como, por ejemplo, el aumento de fauna salvaje portadora de garrapatas y el abandono rural de ciertas zonas. En este sentido, Pradera apunta a la expansión de conejos, jabalís y ciervos en zonas naturales como bosques y parques situados en los alrededores de las grandes ciudades. "Las zonas más afectadas son las regiones costeras, desde Barcelona hasta Almería pasando por Tarragona, Castellón y Murcia. En los últimos años se ha detectado un aumento importante en el número de 'garrapatas urbanas' en estas regiones, así como en otras zonas de la meseta", explica el experto.

Aumento de enfermedades 'exóticas'

El 'boom' de garrapatas en España no solo preocupa por el potencial de estos insectos de convertirse en plagas sino, sobre todo, por el impacto que podrían tener a nivel de salud pública. "El problema no es la picadura en sí de una garrapata sino saber si el animal estaba infectado con algún virus o bacteria y si esto puede provocar una enfermedad", comenta el epidemiólogo Antoni Trilla. Según explica el especialista, en la mayoría de casos las mordeduras de estos insectos "no dan ningún tipo de complicación" y se solucionan extrayendo a las garrapatas de la piel. Aun así, avisa Trilla, hay que vigilar la aparición de síntomas inusuales ya que la picadura de un insecto infectado por ciertos patógenos puede derivar en infecciones como la enfermedad de Lyme o la fiebre hemorrágica Crimea-Congo.

La picadura de estos insectos se asocia con un incremento de casos de enfermedad de Lyme o la fiebre hemorrágica Crimea-Congo

"Hace unos años, los médicos sólo sospechaban de este tipo de enfermedades si el paciente había viajado recientemente a algún país tropical. Pero ahora, debido al cambio climático, estas enfermedades que considerábamos como 'exóticas' empiezan a darse de forma natural en España. Ya no hablamos de enfermedades importadas, sino de casos autóctonos", comenta Trilla, quien reclama a los médicos españoles "estar alerta" ante la aparición de ciertos cuadros que puedan sugerir la aparición de estas enfermedades tropicales. Según datos proporcionados por el Ministerio de Sanidad, en lo que llevamos de 2024 se han notificado al menos dos casos confirmados de infección por virus de la fiebre hemorrágica Crimea-Congo. Desde 2013 hasta ahora se han confirmado un total de 15 casos de esta enfermedad en España y seis fallecimientos. 

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