Fugitivos y crímenes

Cuando el 'confidente' policial son las redes sociales: internet se erige en una "ayuda muy útil" en casos imposibles

El sicario fugitivo Jonathan Montoya se entregó días atrás a la policía tras aparecer en la lista 'on line' de los delincuentes más buscados, que acabó con su anonimato

Jonathan Montoya, el fugitivo más escurridizo de España: 15 años huyendo por el crimen de Don Leo

La Policía pide ayuda ciudadana para encontrar a los diez fugitivos más buscados

Fotograma de un video promocional de la lista de más buscados difundido por la Policía a través de Whatsapp

Fotograma de un video promocional de la lista de más buscados difundido por la Policía a través de Whatsapp / CNP

Juan José Fernández

Juan José Fernández

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Solo 'online', una audiencia potencial de nueve millones de personas tenía la pasada semana el retrato de Jonathan Montoya Rendón, el sicario colombiano condenado por colaborar en el asesinato en Madrid de Leónidas Vargas, ‘don Leo’, narco dirigente del cártel de Caquetá, y escapado tras quebrantar su condena a 24 años de cárcel.

El caso de la fuga de Jonathan Montoya “estaba frío”, comenta una fuente de la Dirección General de Policía. O sea, que la búsqueda ya llevaba tiempo sin solución, ni siquiera avances. El sicario, preso fugado, se escondía tras la apariencia de un inmigrante americano más, con una vida discreta en la periferia de Madrid, ganándose el pan como albañil en una obra.

Pero que la Policía Nacional difundiera por todos los rincones la pasada semana su lista de los 10 más buscados había acabado con su anonimato, multiplicando la presión enormemente a su alrededor. "Ha sido muy útil", asegura la fuente policial. El anuncio sobre su búsqueda tenía cuatro millones de visualizaciones en redes sociales. Le estaban reconociendo los otros trabajadores de la obra; le miraban mucho los vecinos de su barriada. Cuando vio pasar un coche de la Policía Municipal de Madrid decidió entregarse. Se lo llevaron al centro que la Policía Nacional tiene en el barrio de Canillas.

Millones de ojos

La entrega de Jonathan Montoya ha confirmado a la Policía Nacional la utilidad de requerir la colaboración ciudadana en redes sociales para casos de difícil solución. Esta vez no ha sido un chivatazo anónimo el que ha propiciado la resolución de la fuga, pero sí la presión que crece cuando la cara de un objetivo policial está al alcance de millones de ojos.

De hecho, de la eficacia de las campañas 'most wanted' (Más buscados), que en su día reestrenó el FBI norteamericano y que se generaliza en Europa, tiene constancia la Policía Nacional desde que, el año pasado, cayeron detenidos seis de los diez publicitados en la lista. "A veces no pasa nada cuando publicas. En otras ocasiones, quizá la gente no llama, pero el buscado se da por aludido, se pone nervioso, se mueve... comete algún error", relatan las mencionadas fuentes.

Este es el tercer año de edición de un cartel de buscados de la Policía en redes sociales y medios de comunicación, y las fuentes consultadas esperan más detenciones en una lista “fría” en la que hay gente peligrosa: tres pederastas que planificaron minuciosamente su huida, cuatro narcos con contactos en tres continentes, dos asesinos… menos uno, que se ha entregado.

Europol renueva periódicamente un amplio cartel de 'los más buscados de Europa'

Europol renueva periódicamente un amplio cartel de 'los más buscados de Europa' / Europol

La Policía es la fuerza de seguridad del Estado con más audiencia en redes sociales. Sus 'community managers', reiteradamente premiados, cuentan nueve millones de seguidores en X, Facebook, Instagram y TikTok, y con una creciente cuenta de whatsapp que, fundada el 3 de noviembre de 2023, este jueves tenía ya 498.468 seguidores.

Pistas

Hace seis años ya se vio venir el fenómeno cuando la Policía Nacional abrió un buzón electrónico de denuncias anónimas contra narcos. Se pedía a la gente que enviara información, cualquier dato que pudiera servir, a la cuenta de correo antidroga@policia.es . Y en cuanto se estrenó empezó a dar resultados, “permiténdonos interceptar grandes cantidades de cocaína en envíos”, relatan las mencionadas fuentes. No todo era colaboración de los vecinos: también se cruzó alguna que otra denuncia de narco contra narco.

La Policía ha encontrado en las redes sociales “una forma exitosa de reunir a todos los vecinos en la plaza del pueblo y darles aviso”, explica un ejecutivo de Interior. Se recurre e este pregón virtual para pedir colaboración también para casos que, por su duración, están ya cerca de prescribir.

Pero ese “twitter, haz tu magia” no solo ha funcionado difundiendo caras. También el público de redes sociales reacciona cuando se le da una pista de un crimen real, un objeto, una imagen, un indicio ante el que los agentes no consiguen avanzar más y piden colaboración.

Dos imágebes de pistas difundidas por la Policía para la resolución de crímenes en 2022

Dos imágebes de pistas difundidas por la Policía para la resolución de crímenes en 2022 / El Periódico

Dos casos de 2022 lo evidencian. En enero de 2022, la Policía difundió un fotograma de un vídeo tomado por un pederasta. Se veía un cuarto infantil, el de una niña, una de sus supuestas víctimas. Y apareció alguien que reconoció el dormitorio y aportó información clave para la captura del agresor.

En noviembre, los agentes decidieron mostrar al público un tíquet naranja, de 1,80 euros, de un bazar chino. Había sido encontrado en la escena del asesinato de un individuo latinoamericano. Hubo quien reconoció el comercio, de Parla, en los alrededores de Madrid. Resultó ser en esa tienda donde el autor del crimen adquirió guantes de látex y cinta adhesiva para el delito.

Buzones

No hay recompensas a la americana tras estas peticiones de colaboración ciudadana que ya proliferan por el continente. Europol tiene una de las más nutridas, EU Most Wanted, con un cartel de medio centenar de caras de criminales en fuga de diversos países. Algunos llevan la etiqueta roja "dangerous". Entre ellos hay un español, Ramón de la Cámara Guisado, buscado desde hace un año tras disparar a su hijo con una pistola.

Moncloa también tiene abierto un canal de denuncias que conecta con el europeo

Moncloa también tiene abierto un canal de denuncias que conecta con el europeo / El Periódico

El Reino Unido, por su parte, introduce peticiones de sus fuerzas de seguridad en Crimestoppers, página de una organización privada conjurada contra el delito y en pro de las víctimas. "No somos la Policía", advierten sus promotores. Aquí la búsqueda se externaliza.

Pero las peticiones de ayuda ciudadana han desbordado ya el ámbito policial... que no criminal. La Comisión Europea mantiene abierta una página para “denunciantes e informantes” de prácticas que vayan contra la equidad o la libertad del mercado. El gobierno de la UE pide ayuda para “descubrir, entre otras cosas, cárteles y otras prácticas anticompetitivas con mayor rapidez”.

Esta vía de denuncia tiene franquicia de acceso en Moncloa, como en otras sedes de ejecutivos europeos. Presidencia del Gobierno ha incorporado el software de Denunciantes e Informantes, y abre un pasillo de acceso al buzón general.

La página nació cinco años después de la que tiene activa la OLAF, la Oficina Europea Antifraude, que lucha contra la corrupción interna y la malversación de fondos publicos. “Puede ponerse en contacto con nosotros de forma anónima. No hay ningún trámite. Solo tiene que facilitarnos la información más precisa y detallada posible”, anima la web a los visitantes.

El riesgo de cada buzón de denunciantes es que se llene de falsedades u obsesiones del público más excéntrico, pero, al fin y al cabo, comenta un veterano de las unidades de delitos tecnológicos de la Policia, "en estos correos siempre entran cosas útiles".

Suscríbete para seguir leyendo