Un 2,4% de la provincia

El 90% del gasto eléctrico de Barcelona se puede cubrir con placas solares en el suelo

La Diputació de Barcelona ha mapeado todos los municipios para analizar dónde es idóneo instalar placas solares sin causar grandes impactos sobre el terreno

¿Por qué hay tan pocas renovables en Catalunya?

Parque solar en Aragón

Parque solar en Aragón / SIPA

Guillem Costa

Guillem Costa

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La preocupación ha crecido entre los alcaldes: "¿Cómo puedo saber si esta es una buena zona para instalar placas fotovoltaicas o no?", se preguntan muchos de ellos. Para dar respuesta a estas dudas cada vez más habituales, la Diputació de Barcelona ha mapeado toda la provincia para determinar qué lugares son ideales para colocar placas solares y cuáles no.

La conclusión es que cubriendo solo un 2,4% de la demarcación (18.859 hectáreas), se puede garantizar el 90% del actual consumo eléctrico. En concreto, utilizando solo los terrenos donde las placas causarían menos impacto (los espacios degradados, de potencial alto y de potencial medio), se producirían 23.000 gigavatios (el actual gasto eléctrico de la provincia es de 25.300 gigavatios).

Hace tiempo, como en materia de renovables es buena idea empezar a construir la casa por el tejado, la Diputació ya cartografió el potencial fotovoltaico de todos los techos de cada localidad. Por lo tanto, si ahora se suma lo que se puede llegar a generar en los tejados y el potencial del suelo, tenemos que con ambos se puede cubrir un 140% del consumo eléctrico de la provincia. Y aquí, aún faltaría añadir lo que pueden producir los tejados del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), que ya tiene su mapa particular.

Teniendo en cuenta también el potencial de los tejados, se podría cubrir un 140% del consumo eléctrico de la provincia

Cabe recordar que esto no tiene por qué ser suficiente: para dejar atrás los combustibles fósiles, lo normal es que el gasto eléctrico aumente, si seguimos el camino de las descarbonización. Se entiende bien a través de un ejemplo: si los autobuses que actualmente funcionan con gasolina o diésel, dentro de unos años son eléctricos, se necesitará consumir más electricidad.

Mapa de ayuda

Esta herramienta no es una planificación, solo un instrumento de apoyo a los ayuntamientos que se plantean cómo responder a posibles proyectos fotovoltaicos. "Aquí tienen cabida tanto pequeños parques solares como comunidades energéticas que proponen instalar paneles en un punto concreto", detalla Marc Serra, responsable del área de Acción Climática y Transición Energética de la Diputació.

A la hora de elaborar el mapa, se han descartado las zonas con un potencial bajo, al ser campos agrícolas o lugares en los que podría surgir un conflicto social. No obstante, hasta que una empresa promotora o una comunidad energética no proponga un proyecto concreto, el mapa es solo un dibujo del potencial. Pero sí es cierto que, si se juntan los terrenos antropizados y los que disponen de un potencial alto y medio, se alcanzaría este 90% del gasto eléctrico actual (sin tener en cuenta los tejados).

"Ahora sabemos qué zonas son mejores para lograr acelerar la transición energética", se satisface Serra. "La idea nace a partir de la demanda de alcaldes que recibían propuestas y no sabían como responder a ellas, pero puede ser útil para cualquiera que se plantee instalar placas fotovoltaicas en la provincia de Barcelona", añade. El siguiente paso será comprobar si estas zonas acaban dedicadas a la producción de energía o no.