Sanidad pública

El Hospital del Mar practica una cirugía láser pionera para un tipo de tumor cerebral

Aumentan los contagios e ingresos por covid en Catalunya: "Hay que revacunar a la población este verano"

La venta de antígenos del covid-19 se dispara más de un 700% en las farmacias de Catalunya

La entrada del Hospital del Mar de Barcelona.

La entrada del Hospital del Mar de Barcelona. / Ferran Nadeu

El Periódico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El Hospital del Mar es el primer hospital de España que utiliza la ablación con láser guiada por resonancia magnética para tratar un glioblastoma, el tipo de tumor cerebral agresivo que en algunos casos no se puede extirpar con los métodos quirúrgicos convencionales.

Según ha informado este miércoles el hospital, este nuevo abordaje emplea una técnica mínimamente invasiva, la terapia térmica intersticial con láser (LITT), reservada sobre todo para pacientes con epilepsias refractarias, crisis convulsivas que persisten a pesar de tomar fármacos anticonvulsivantes.

En casos muy concretos de glioblastoma, pueden recibir este tipo de cirugía láser los pacientes con tumores que no puedan extraerse quirúrgicamente y en los que se hayan agotado todos los tratamientos sistémicos habituales.

Asimismo, el tumor debe tener unas dimensiones determinadas, de unos tres centímetros, una forma geométrica determinada, y el paciente debe estar en buen estado físico y neurológico para poder soportar las posibles complicaciones de la intervención.

Una alternativa tras la cirugía abierta

El caso intervenido en el Hospital del Mar se llevó a cabo el pasado 21 de mayo, concretamente a un hombre de 45 años operado con cirugía abierta por primera vez en 2022, con resección completa, y recaída tumoral en 2023 que pudo operarse de nuevo con el mismo procedimiento y resultado.

Sin embargo, en 2024 se detectó una nueva recidiva con afectación del área de la motricidad y del cuerpo calloso, un área con implicaciones cognitivas muy importantes que impidió otra cirugía abierta, por lo que reunía las condiciones idóneas para arriesgarse a un tratamiento con LITT.

Antes de proceder a la cirugía láser, tuvo lugar una planificación días antes de las trayectorias escogidas para las dos sondas láser dentro del tumor.

Una vez colocadas las sondas con la ayuda de un brazo robótico, el paciente y el equipo quirúrgico se trasladaron a la sala de resonancia magnética para realizar la ablación térmica.

"El grado de ablación se evalúa mediante mapas de termografía por resonancia, que muestran, en tiempo real, la temperatura, tanto en los puntos a destruir como en los puntos de seguridad", ha detallado el doctor Jaume Capellades, jefe de la Unidad de Neurorradiología del Servicio de Radiología del Hospital del Mar.

El especialista ha agregado: "Esto permite realizar un seguimiento constante del proceso, proporcionando gran precisión en la necrosis inducida y, sobre todo, seguridad, impidiendo la coagulación de las estructuras críticas adyacentes".

En total, estuvieron cuatro horas dentro de la resonancia hasta finalizar el tratamiento, con el apoyo de los profesionales del equipo del Servicio de Anestesiología del centro sanitario.

Prudencia pese a los resultados positivos

El paciente fue dado de alta el quinto día después de la intervención y no presentó secuelas, descartando tanto el sangrado como la aparición de edema e incluso recuperando algunas de las capacidades que se habían visto afectadas por el tumor.

Las pruebas con contraste llevadas a cabo después de la intervención muestran que ya no se produce captación del contraste por parte de las células tumorales en el cerebro, hecho que solo se produce en aquellos casos en los que el tratamiento empleado tiene éxito.

"Es necesario un seguimiento a medio plazo para ver el impacto en la evolución de la enfermedad, aunque podemos decir que no ha habido complicaciones y que la imagen de después del tratamiento es muy satisfactoria", ha valorado la doctora Gloria Villalba, coordinadora del Servicio de Neurocirugía del hospital barcelonés.

Después de esta intervención, el Hospital del Mar ha incorporado la técnica LITT a su cartera de servicios, tanto para tratar glioblastomas como metástasis cerebrales.