Abusos en las aulas

Investigado un profesor de inglés de un colegio de Getxo por presuntas agresiones sexuales a niñas de 4 años

Cuatro familias han denunciado ante la policía al docente, que practicaba "juegos secretos" con niñas de 4 años

Entrada del colegio SEI Europa, en Getxo (Vizcaya).

Entrada del colegio SEI Europa, en Getxo (Vizcaya). / E. P.

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Tras la denuncia ante la policía autonómica vasca de cuatro familias, el colegio SEI Europa de Getxo (Vizcaya) ha apartado del claustro a un profesor de inglés por haber cometido, presuntamente, agresiones sexuales a alumnas del aula de 4 años (etapa de infantil). 

La semana pasada, la madre de una de las menores acudió al Hospital de Cruces (Bilbao) después de que la pequeña se quejara de un dolor intenso en la vulva. Los médicos certificaron indicios de agresión sexual. Una vez que la madre lo comentó, el resto de familias comenzaron a sospechar y a preguntar a sus hijas. A pesar de su corta edad, varias describieron que el sospechoso practicaba “juegos secretos” con ellas cuando las acompañaba al baño, ubicado dentro de las aulas. Otra de las víctimas, en una revisión médica, se puso muy nerviosa y no quería que nadie le quitara la ropa interior.

Además de las cuatro familias que han denunciado ante la Ertzaintza, otras dos también tienen altas sospechas de que el depredador sexual agredió a sus hijas. Sin embargo, todavía no han acudido a la comisaría.

El profesor acusado, de unos 30 años, no solo daba clases a los niños y las niñas de infantil sino que también lo hacía en primaria, donde las familias no tienen constancia de abusos. El docente era uno de los encargados de la inmersión en inglés del centro, un histórico colegio concertado y laico de ambiente familiar, buena convivencia y muy integrado en el pueblo de Getxo.

Ante la intranquilidad de toda la comunidad educativa, el colegio ha enviado esta mañana un comunicado a todas las familias en el que aseguran haber actuado “con la máxima diligencia” y haber apartado al docente “inmediatamente”. “Todas las actuaciones del centro van dirigidas, por un lado, a proteger a los alumnos y sus familias, y por otro, a evitar interferir en los procedimientos legales abiertos. Cualquier interpretación en otro sentido, carece de todo fundamento”, concluye.

Quejas de las familias

La opinión del centro, sin embargo, no es compartida por las familias afectadas, que se lamentan del trato que -durante estos días y tras haber comentado lo sucedido- han recibido por parte de la dirección. Ayer, las madres y los padres mantuvieron una reunión “muy tensa” en la que, una vez más, no se sintieron respaldadas.

Es tal la indignación de las familias de las víctimas que están planeando sacar a sus hijas del colegio en los próximos días. “Con el dinero que nos ahorramos, podemos contratar a una monitora para estas niñas lo que queda de curso. El año que viene mi hija no vendrá aquí. Y tampoco su hermana mayor, que está en primaria. No soy de quejarme, pero lo que ha pasado es muy grave y no nos sentimos respaldados ni apoyados por la dirección”, explica, muy afectado, uno de los progenitores. 

La dirección del centro ha vuelto a convocar a las familias de infantil a otra reunión esta tarde.