Violencia en la 'colla'

Condenado un 'excasteller' de Barcelona a casi 11 años de cárcel por agresiones sexuales a 9 menores

Un excasteller de Barcelona acepta 10 años de prisión por abuso de 9 menores y evitará la cárcel

El fiscal reclama casi 39 años de prisión para un exmiembro de los Castellers de Barcelona por abusar de menores

El 'casteller' de la 'colla' de Barcelona juzgado por agredir sexualmente a nueve menores de edad entre 2014 y 2019.

El 'casteller' de la 'colla' de Barcelona juzgado por agredir sexualmente a nueve menores de edad entre 2014 y 2019. / FERRAN NADEU

Germán González

Germán González

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La Audiencia de Barcelona ha condenado a 10 años y 8 meses de prisión a Eduard P. A., ex 'cap de colla' de los Castellers de Barcelona por varios delitos de agresiones sexuales a 9 menores que formaban parte de este grupo entre 2014 y 2019. En el juicio celebrado hace unas semanas el condenado admitió que llevó a su casa a las víctimas con el pretexto de darles un masaje y que allí las agredió sexualmente, además de masturbarse ante una de ellas.

Tras la confesión en el juicio, la Fiscalía y la defensa del procesado alcanzaron un acuerdo para rebajar los 39 años de prisión que pedía en un principio a casi 11, además de una indemnización de 6.000 euros para cada una de las menores que denunciaron. Sin embargo, los abogados el condenado piensan recurrir la sentencia para pedir la suspensión del ingreso en prisión.

Después del juicio cuatro de las víctimas que estaban presentes en la sala afearon al condenado que no les hubiera pedido perdón por las agresiones sexuales pese a su confesión ante el tribunal. El 'excasteller' estuvo 20 años en la 'colla' y realizó diversas funciones, entre ellas la de técnico de niños, por lo que se ganó la confianza de las familias. Invitaba a algunos de los niños y niñas del grupo en su casa después de los ensayos o antes de una actuación, sobre todo a las niñas y adolescentes, a los que conocía de hacía años y les ofrecía dulces y golosinas

La sentencia indica que con la excusa de que sabía masajear para que durmieran mejor o tuvieran menos molestias musculares tocaba los genitales de las menores. En alguna ocasión también entró en el baño sin avisar a pesar de saber que se estaban duchando. A una de las chicas, de las que había tenido la guarda durante tres meses mientras su madre estaba de viaje, le hizo tocamientos entre el 2014 y el 2017, cuando tenía entre 16 y 18 años.

Bloqueo de las víctimas

 En al menos dos ocasiones aprovechó que le masajeaba cuando estaba boca abajo para tocarle un pezón y los genitales. La chica se quedó bloqueada y se hizo la dormida para salir de la situación. A otra joven, entre octubre y noviembre del 2014 le cogió el brazo y le apoyó sobre su pene en erección. También se quedó bloqueada hasta que reaccionó, se hizo la dormida y se volvió.

Entre el 2014 y el 2018 a otras dos chicas, y entre el 2014 y el 2015 a una tercera, les dio masajes en la espalda tocándoles los senos por los laterales y el culo, a veces por encima de la camiseta y otras veces por debajo. Una de ellas se quedó bloqueada y sólo pudo cruzar los brazos y moverse inquieta. Otra le dijo que no le parecía bien, y el hombre le respondió que el masaje era así. Ella reaccionó girándose y haciéndose la dormida.

Expulsión de la colla

En junio del 2018, invitó a varias menores a su casa a dormir y allí les tocó el culo. Durante la madrugada, una de las adolescentes despertó sobresaltada al oír unos gemidos y vio al condenado masturbándose en un lado del sofá de la misma habitación donde dormían. La chica hizo ver que seguía durmiendo. Entre 2015 y junio de 2019, masajeó a otras tres menores empezando por las cervicales y acabando con las manos sobre el culo, por encima de las braguitas. A una de ellas, además, le tocó el lateral de los senos. Las menores hacían ver su disgusto diciéndole que no era necesario, se volvían o se hacían las dormidas. 

En un comunicado tras el juicio, los Castellers de Barcelona hicieron definitiva la expulsión del condenado, ya que desde 2019 tenía una provisional cuando se conocieron los hechos. La entidad añadió que han estado a la disposición de la justicia y de los Mossos d'Esquadra desde que se denunciaron las agresiones y que han "trabajado para acompañar a todas las personas afectadas y evitar posibles futuras situaciones similares" con la presentación en 2021 del primer protocolo contra el abuso sexual infantil en el mundo 'casteller'.