Tos seca en niños: cómo aliviarla y cuándo hay que preocuparse

La tos, en niños y adultos, es un síntoma habitual de la mayor parte de las enfermedades respiratorias. Ahora bien, hay varios tipos de tos, en función de la enfermedad que la provoca y según la zona de las vías aéreas afectadas. Identificar bien los diferentes tipos de tos, ayuda a saber qué hacer, cómo ayudar al pequeño y cuándo se debe acudir al pediatra. La tos suele diferenciarse en tos seca y tos productiva. La primera hace referencia a que no viene acompañada ni de flemas ni de mucosidad, mientras que la segunda sí va unida a las flemas y mucosidades.

La tos seca puede ser causada por varias enfermedades, desde las alergias hasta el reflujo ácido y, evidentemente, es común y suele aparecer con la mayoría de los catarros o resfriados. Al principio, según informa la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), la tos en las infecciones respiratorias es seca, es decir, no viene acompañada de flemas que el niño pueda expulsar, pero con el paso de los días puede hacerse productiva y aparece el moco y el esputo.

Ocho remedios caseros para combatir la tos

La tos podría decirse que es 'buena', sirve para limpiar las vías respiratorias, es un mecanismo de defensa de nuestro cuerpo. Ahora bien, puede ser molesta y afectar a la calidad de vida del niño e impedirle dormir bien. Además, en los primeros años de vida, los niños no saben eliminar el moco, no se limpian bien, no saben escupirlo y se lo tragan. Incluso, pueden toser tanto que se les active el reflejo de la náusea, lo que les puede hacer vomitar.

¿Cuánto puede durar la tos seca?

La tos es uno de los síntomas que pueden alargarse más en los procesos infecciosos. A veces dura dos y tres semanas, por lo que ayudar al pequeño en este proceso puede aliviarle y no hay que preocuparse por la duración. Ahora bien, los pediatras advierten que la tos seca no debe tratarse con jarabes para la tos, mucolíticos, expectorantes o antihistamínicos, especialmente en menores de seis años. No está demostrado que estos medicamentos sean eficaces en menores y los riesgos pueden superan los posibles beneficios. Tampoco son útiles los antibióticos.

Cómo prevenir catarros y resfriados

Los remedios para la tos seca

Frente a ello, los pediatras recomiendan las siguientes acciones:

• que el niño beba muchos líquidos.
• que si el ambiente de la casa es seco, se pongan envases con agua cerca de los radiadores.
• hacerle lavados nasales.
• También, aunque parezca extraño, exponerle brevemente al aire fresco puede aliviar un golpe de tos seca.
• Además, para la tos 'perruna' o metálica, propia de la laringitis, es eficaz quedarse sentado en el baño con el niño mientras alguien se da una ducha, para que aspire vapor de agua.
• Asimismo, la miel ayuda a suavizar la tos (y el dolor de garganta, si también ha aparecido).
• Por último, no conviene exponer al menor al humo del tabaco o de los cigarrillos electrónicos.

Cuándo acudir al pediatra

No obstante, Teresa Cenarro, vicepresidenta de AEPap, indica que aunque la tos es "buena porque es un sistema defensivo de los procesos respiratorio, si aparece dificultad respiratoria, se acompaña de mal estado general o fiebres elevadas hay que consultar al pediatra".

Asimismo, si también aparece dolor de oídos o supuración, o la tos se prolonga durante más de un mes, conviene también acudir al centro de atención primaria para que un especialista investigue si se trata de una tos crónica producida por enfermedades como el asma.