Educació llama a las escuelas a aplicar los protocolos contra la violencia "al primer indicio"

Una de las frases más repetidas este martes en el Teatre Zorrilla de Badalona, lleno hasta la bandera de docentes, ha sido "ante la más mínima sospecha, activad el protocolo y ya veremos si hay violencia". Un protocolo nuevo y unificado –que sustituye a los cuatro que funcionaban en paralelo hasta ahora- creado por el Departament d'Educació para ser una de las principales herramientas de las que dispondrán los nuevos coordinadores de coeducación y bienestar emocional del alumnado -bautizados como ‘cocobes’ por la 'conselleria' y como referentes 'antibullying' por la prensa-, figura que este septiembre se ha incorporado a los 3.500 centros catalanes de educación primaria y secundaria (tal y como obliga la ley estatal de protección a la infancia) en el marco del programa Escoles Lliures de Violència.

Unos 400 docentes participan en la primera formación de coordinadores 'antibullying'

Las más de 400 personas que han llenado esta mítica sala son los directores y referentes 'antibullying' de las escuelas e institutos del Barcelonès; en una presentación que se irá repitiendo en los próximos días en todos los Servicios Territoriales de Catalunya y que da inicio a las 30 horas de formación que recibirán los docentes que asumen desde este curso esta nueva función, a la que el Departament asigna "un mínimo de una hora a la semana", señala la directora general del alumnado Chillida [el tiempo dependerá de "la realidad y necesidades de cada centro"].  

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"Tenemos que entender que dentro de los centros se dan situaciones de violencia. Pasamos de cuatro protocolos a uno solo para facilitar el trabajo. Así no tenemos primero que averiguar si se trata de ciberacoso o violencia machista para ver qué protocolo aplicar. El nuevo protocolo, de hecho, es una de las primeras herramientas de prevención", ha proseguido Chillida. En la misma idea ha insistido Neus Folguera, coordinadora de la Unidad de Apoyo al Alumnado en Situación de Violencia (USAV), quien ha reiterado a los docentes que ante la más mínima duda, contacten con ellos. Estos, mientras, tomaban notas y confiaban, como señalaban tras la charla, en que esas llamadas fueran atendidas y se les dieran las respuestas que muchas veces no llegan.

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Después de la presentación institucional de las novedades [principalmente el nuevo protocolo y el nuevo Registro de Violencias contra el Alumnado (REVA)] la coordinadora y una trabajadora de la USAV han pasado a la parte práctica, la que los docentes más esperaban.

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No juzgar

El primer ejemplo es el de una alumna de tercero de ESO con una expareja que la amenaza con difundir imágenes de contenido sexual. El primer consejo, en absoluto sobrero, es no juzgar. "El sexo sigue siendo un tema tabú, no solo para los adolescentes, también para los adultos. El primer éxito es que esta alumna tenga la confianza de venir a explicarnos la situación. Si eso pasa, que es lo que buscamos, no hagáis ningún juicio de valor, para eso están los protocolos. Vuestro papel es solo escuchar, acompañar y creer. No tenéis que dar muchas respuestas. La primera respuesta tiene que ser 'gracias por haber confiado, gracias por habérmelo dicho' e iniciar el protocolo, que nos guiará los siguientes pasos. Es muy importante no esperar a que la situación sea grave para actuar", señalan. Algo que resumen en la mil veces repetida expresión "cambio de mirada", que aquí sí parece tener sentido. De hecho, es algo que llevan años reivindicando las familias de niños y niñas víctimas de 'bullying', que en muchas ocasiones sienten, y así lo expresan, que los centros son reticentes a admitir el problema por miedo a la etiqueta de centro conflictivo.

No hagáis ningún juicio de valor, para eso están los protocolos; vuestro papel es solo escuchar y acompañar

Otra reivindicación que viene de lejos, en este caso por parte de los docentes, es que haya recursos humanos especializados acompañando a estos nuevos protocolos.

El papel de la familias

La primera formación de los referentes 'antibullying' en el Barcelonès también ha dedicado tiempo a proyectar una entrevista al psicólogo de Sant Joan de Déu Fran Villar, especialista en conductas suicidas, quien pone mucho énfasis en el papel de la familia y de las pantallas: "Es muy duro cómo estamos dejando que a nuestros hijos los eduque vete a saber quién".

"Hay dos elementos de prevención de violencias clave, tanto de suicidios como de consumo de tóxicos o de relacionarse de forma más sana a nivel sexual: que sepas en todo momento dónde está tu hijo adolescente y con quién. Con las pantallas, puedes tener a tu hijo al lado con el móvil y no sabes ni con quién está ni dónde", resume el psicólogo, quien ve positiva la creación de la figura referente "para evitar la difusión de la responsabilidad".