El Gobierno insta a las autonomías a invertir en terapias de atención temprana para niños

El Ejecutivo y las comunidades autónomas han acordado este lunes una hoja de ruta destinada a mejorar los servicios de atención temprana en España, que son aquellas terapias destinadas a niños de cero a seis años con problemas de neurodesarrollo. La atención temprana no está incorporada a la cartera de servicios común del Sistema Nacional de Salud, depende de cada comunidad y normalmente tiene mucha demanda y largas listas de espera, por lo que las familias que pueden permitirselo, acuden a consultas privadas de logopedas, psicólogos, fisioterapeutas u otros especialistas, en función de las necesidades del niño.

Para paliar este problema, el Gobierno y las comunidades han celebrado un Consejo Interterritorial mixto entre ministros y consejeros de Derechos Sociales y Sanidad, en el que han pactado que la atención temprana sea "universal, pública, gratuita y de calidad", según ha destacado la ministra Ione Belarra tras el encuentro. Para ello, Belarra y el ministro de Sanidad, José Miñones, han instado a "todas las administraciones" a poner "los medios y recursos" necesarios para que se avance en "la garantía del derecho de los niños" a recibir dichas terapias.

La hoja de ruta pactada implica una "atención rápida y eficaz", según Belarra. Para ello, marca como objetivos reducir los tiempos de espera entre la detección y la prestación de los servicios; agilizar los trámites de acceso y que la atención sea lo más personalizada posible, en los entornos de los niños y sus familias.

Líneas de actuación

Asimismo, tiene ocho líneas de actuación, entre las que se incluye mejorar la coordinación interadministrativa y con las familias; planificar, dimensionar y articular fórmulas de financiación adecuadas para los equipos, centros y servicios en función de la población a atender; garantizar la valoración e intervención integral; ofrecer más y mejores oportunidades de formación a los profesionales implicados y optimizar los sistemas de información y registro.

El acuerdo incluye además la creación de una Red de Atención Temprana de carácter universal, de responsabilidad pública y gratuita, que permita la vinculación, a partir de unos criterios comunes, de los sistemas de salud, educativo o servicios sociales, que según la estrategia han de trabajar de forma coordinada con el resto de profesionales implicados en cada caso.