Guía básica para desmontar a un negacionista climático

Esta semana ha arrancado la 27ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, o COP27, la reunión anual del clima, en Sharm El-Sheikh (Egipto). Es una reunión marcada por polémicas relacionadas con el 'greenwashing', la desconfianza acerca de llegar a acuerdos ambiciosos y las exigencias del sur global de que las grandes potencias financien los daños ocasionados por los fenómenos meteorológicos extremos, cada vez más frecuentes. 

La desinformación es el otro fantasma de la cumbre, con artículos en medios generalistas y programas de radio donde se emiten mensajes falsos o engañosos sobre el origen del cambio climático o su verdadero alcance. Algunos de estos mensajes se creían superados hace años, pero lo cierto es que siguen estando de actualidad. Estos son los más repetidos. 

"Los modelos no son fiables"

Es habitual escuchar en tertulias, columnas de opinión e incluso en conversaciones de amigos que los modelos de predicción que los climatólogos emplean para hacer sus estimaciones no son fiables. 

Es falso: las predicciones, si bien no son perfectas, han previsto con bastante precisión desde los años 70 escenarios que a día de hoy son una realidad, como que la Tierra se calentaría progresivamente como consecuencia de la emisión del CO₂ de origen humano. 

"Siempre ha hecho este calor"

Lo hemos oído muchísimo en este verano de récord de temperaturas. Sin embargo, es falso. El aumento de las temperaturas ha quedado ampliamente constatado en los informes del IPCC, donde el grupo de expertos señala que “el calentamiento inducido por el hombre alcanzó aproximadamente 1 °C [...] por encima de los niveles preindustriales (alrededor de 1850) en 2017, aumentando a 0,2 °C [...] por década”.

En España, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) también ha destacado esta subida de las temperaturas en sus informes, señalando que, desde 1984, se ha “duplicado el número de días al año en que se superan los umbrales de temperatura de ola de calor en la Península”, mientras que los episodios fríos “se han reducido un 25%”.

"El clima es cíclico"

Esta afirmación engañosa parte de la premisa de que el aumento de temperaturas que la Tierra está experimentando tiene un origen natural y que obedece a la misma lógica que las grandes variaciones climáticas que han tenido lugar en el pasado en la Tierra.

Sí, es cierto que la Tierra ha sufrido cambios climáticos en el pasado, pero el actual se debe principalmente a la emisión de gases de efecto invernadero al quemar los combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas), fruto de la actividad humana, junto con la deforestación y otros fenómenos. Además, estos cambios se están produciendo a una velocidad nunca vista desde la extinción de los dinosaurios. 

“Mientras China sea de los países que más contamina, lo que hagamos los demás no sirve para nada”

Es cierto que una sola persona por sí misma no puede producir un impacto significativo en cuanto al volumen total de CO₂ si se compara con los grandes emisores del mundo, que no solo es China, sino también Estados Unidos, o las grandes fortunas. Sin embargo, cualquier emisión que se reduzca contribuye a no pasar de los famosos 1,5 grados de calentamiento. 

 Además, la contaminación puede medirse en términos absolutos (cuántos gases de efecto invernadero (o GEI) emite un país, independientemente de lo grande que sea) o cuánto contamina por persona al año  (las emisiones per cápita). China es el mayor contaminante en términos absolutos, pero según los datos más recientes de Global Carbon Project (GDP), los países que más contaminan per cápita son Qatar, Baréin, y Kuwait. 

"El IPCC es un chiringuito de políticos"

Para tratar de deslegitimar a los organismos oficiales que estudian a fondo la ciencia climática, suelen decirse rumores como que el IPCC, el grupo de expertos del cambio climático más reconocido a nivel mundial, es un chiringuito de políticos, o que sus científicos están comprados.

Sin embargo, el IPCC es un organismo independiente. De él forman parte científicos de todo el mundo vinculados al clima, y además goza de la mayor autoridad cuando se trata de abordar aspectos sobre este tema.

“Los meteorólogos son alarmistas”

Este mensaje parte de la premisa de que los meteorólogos de la televisión son alarmistas al utilizar una paleta de colores diferente al pasado porque el objetivo es “alarmar”. Es falso: los colores representan un valor de temperatura concreto, no una valoración sobre estas. Los únicos mapas que emplean los colores como elemento comparativo son los de anomalías, en los que los colores señalan, por ejemplo, si una región registra temperaturas más altas o más bajas para la época.

Suscríbete para seguir leyendo