Pandemia y periodismo

Un año de la noticia que nos cambió la vida

La epidemia ha trastocado el día a día de los lectores. También el de los periodistas, que han tenido que realizar un aprendizaje contrarreloj

Dos sanitarios atienden a un paciente de covid en la uci del Hospital de Sant Pau de Barcelona.

Dos sanitarios atienden a un paciente de covid en la uci del Hospital de Sant Pau de Barcelona. / Ferran Nadeu

María Jesús Ibáñez

María Jesús Ibáñez

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Cuenta Marta López, coordinadora del área de Panorama de este diario, que cuando el corresponsal en China, Adrián Foncillas, la llamó hace ahora un año para hablarle de la existencia de una nueva enfermedad respiratoria en la ciudad de Wuhan que empezaba a preocupar a las autoridades, «nada parecía indicar que esa no fuera a ser una más de las crisis sanitarias que se repiten de tiempo en tiempo en los últimos años», cuenta López. «Le pedimos a Foncillas que nos pasase un texto que publicamos inicialmente en nuestra edición digital. Para la de papel, ese día solo disponíamos de un pequeño espacio y metimos la noticia en el hueco de una página interior de Internacional», recuerda.

Ese 8 de enero de 2020, EL PERIÓDICO explicaba por primera vez a sus lectores que había 'Docenas de afectados por una misteriosa epidemia en China'. Nadie hablaba en esos momentos de coronavirus y se desconocía todo, absolutamente todo, sobre la nueva dolencia (ni su origen, ni sus efectos, ni por supuesto su impacto social, económico y emocional). La enfermedad fue bautizada días después como covid-19 e iba a cambiar de arriba abajo las vidas de todos los ciudadanos del planeta.

Solo dos semanas después de la primera publicación en este diario, el 22 de enero, Estados Unidos detectaba en su territorio la presencia del entonces aún llamado ‘virus chino’ y al día siguiente, el 23, el Gobierno de Xi Jinping decretaba el confinamiento de los más de 11 millones de habitantes de Wuhan, una ciudad de la que hasta entonces apenas se había oído hablar en Occidente. La epidemia empezaba entonces a aparecer en las portadas de la prensa española aún con timidez, en lugares de los que en el argot de la profesión se denominan de segunda lectura.

No fue hasta febrero, cuando el covid obligó a cancelar la macrocita del Mobile World Congress, la feria de las nuevas tecnologías que moviliza a miles de personas de todo el mundo hacia Barcelona, cuando aquella noticia ocupó definitivamente la portada y la totalidad de los temas del día de este diario. Y a partir de allí, fue un no parar... 

¿Qué hemos aprendido?

Los periodistas, como la gran mayoría de los lectores, hemos aprendido en estos 12 meses sobre epidemias e infecciones varias, hemos conocido cómo se desarrolla una vacuna y cómo se administra una vez autorizada... y hemos tomado consciencia de los intríngulis, fortalezas y deficiencias del sistema sanitario español. Hemos hablado casi a diario con médicos, enfermeras y epidemiólogos, pero también con pacientes infectados, con cajeras de supermercado, con maestros y estudiantes, con comerciantes y hosteleros desesperados, con taxistas, quiosqueros y usuarios del metro. Y hemos descubierto con preocupación cómo está castigando esta pandemia a los más vulnerables, con la aparición de colas del hambre ante los bancos de alimentos.

Colas en la estación del Nord de Barcelona para el reparto de alimentos para familias con dificultades, el pasado 16 de mayo.

Colas en la estación del Nord de Barcelona para el reparto de alimentos para familias con dificultades, el pasado 16 de mayo. / JORDI COTRINA

El coronavirus ha cambiado por completo las rutinas del trabajo periodístico, porque de golpe (también como la mayoría de nuestros lectores), tuvimos que teletrabajar. La nueva modalidad, que parece haber llegado para quedarse, nos hizo perder el calor de la redacción, pero a la vez nos enseñó a organizarnos de otra manera y a utilizar las nuevas tecnologías como un nuevo aliado. Ese esfuerzo ha sido mayor si cabe en este diario, que durante este tiempo, ha hecho una importante renovación de diseño en web y en papel.

Y también hemos aprendido palabras y palabros que aquel 8 de enero de 2020 eran perfectos desconocidos. Ahora hablamos de desescaladas, de confinamientos perimetrales, de tasas de incidencia o de vectores de transmisión. Durante meses, el coronavirus ha sido el pan nuestro de cada día. ¿Y saben qué? Las audiencias siguen reclamando que les informemos sobre ello. Las del covid siguen siendo las noticias más leídas cada día en nuestra web. Es algo que nos toca demasiado de cerca.  

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