Irene Rigau: «Este curso la 'semana blanca' se mantendrá, no habrá cambios»

Recién llegada a su despacho, laconsellerade Ensenyament, Irene Rigau, anuncia que se propone esquematizar el currículo, diferenciar el tronco de las ramas, o sea insistir en lo básico, para mejorar los resultados académicos.

-A la hora de combatir el fracaso escolar, hay quien se pregunta por qué no se repite más.

-Funciona poco. En los países con más éxito escolar hay poca repetición. La diversidad en el aula es tan grande que lo que se requiere es dar un paso más en la personalización del aprendizaje. Estar atentos a la conquista de competencias y activar mecanismos de refuerzo cuando no se adquieren.

-¿Con eso basta?

-También hay cuestiones organizativas que puede dificultar el aprendizaje. En primaria, por ejemplo, hemos pasado del maestro único que daba todas las materias a la diversidad de maestros que hay ahora. Además de los especialistas de música, plástica, inglés y educación física, los que se añaden para compensar la sexta hora.

-¿Habría que ampliar las horas de clase del profesorado de primaria, que en los últimos años se han reducido de 25 a 23 semanales?

-Los aspectos horarios organizativos son un elemento básico para la mejora del éxito escolar. Por lo tanto tendremos que ver si es sostenible la sexta hora en todos los centros, ver si determinados centros tienen más necesidad que otros por razones socioeconómicas y si la sexta hora ha de tener un carácter más lectivo en unos o de mera atención en otros, y adaptarla a las disponibilidades del sistema.

-¿Pero 23 horas de dedicación lectiva son suficientes o no?

-Este es un punto que forma parte del Pacte Nacional per l'Educació que ha tenido una traducción económica muy importante y que tendrá que revisarse con nuevas miradas con los firmantes del pacto.

-Ha prometido concertar el bachillerato. ¿Ha cuantificado el coste?

-Sí. No recuerdo la cifra concreta, pero es algo asumible si se hace de manera progresiva.

-¿Asumible en esta legislatura?

-No nos hemos propuesto que alcance al 100% sino que vaya creciendo.

-Usted ha dicho que en el proceso formativo a las familias les corresponde el papel de favorecer las condiciones de aprendizaje de los alumnos, como procurar que los niños vayan a dormir temprano.

-Esto puede sonar muy antiguo, pero sí, yo digo que las familias nos han de traer a los niños en condiciones de educabilidad. El aprendizaje requiere que hayas dormido lo suficiente y que hayas desayunado.

-¿Ese es el papel que la escuela reserva a las familias?

-No. Han de participar en la vida del centro a través de los consejos escolares, pero eso ha de ir acompañado de otro tipo de participación, que consiste en hacer el seguimiento de la vida diaria de la escuela. No hay nada tan importante para un niño como que los padres le pregunten cada día qué ha hecho en la escuela. El valor que la familia da a lo que hace en el aula es más determinante que el nivel socioeconómico en los resultados académicos.

-¿Comparte la idea de que 12 semanas de vacaciones en verano son excesivas? ¿Cuál es su propuesta?

-Mantendremos que el curso comience a primeros de septiembre, hacia el 7.

-Serán 11, no cambia gran cosa.

-El calendario escolar ha de dar cumplimiento al mandato legal que fija los días y las horas de clase. Y como siempre estarán por debajo del calendario laboral de las familias, nunca coincidirá, tenemos que quitarnos de la cabeza la idea de encontrar soluciones a los problemas de conciliación tan solo a través de la escuela.

-¿Qué pasará este curso con la semana blanca?

-Hay una orden de calendario. Y lo que está vigente, es vigente. Este curso no habrá cambios, se mantendrá. Si un centro tiene problemas para poder realizarla, podemos hablar.

-Durante los años del tripartito no se han ampliado los conciertos a los centros privados. Eso va a cambiar.

-No tiene ningún sentido dejar de concertar una línea en un centro privado que ya tiene las aulas a punto para poner un barracón al lado en un centro público, como ha ocurrido, por ejemplo, en Reus.

-Usted defiende que los centros que separan a los alumnos por razón de sexo puedan recibir dinero público. ¿No cree que la coeducación ha sido una conquista?

-La LEC ya lo dejó claro. No vamos a movernos de ahí. ¿Y si yo le digo que en EEUU hay escuelas públi- cas que practican la escolarización diferenciada?

-Se trata de experiencias en ambientes concretos, pero aquí tienen otra connotación.

-La diferencia vienen determinada por el titular de la escuela, no por la metodología organizativa.

-¿No es más enriquecedora pedagógicamente la coeducación?

-Yo personalmente llevaría a un hijo a la mixta. Pero todo hay que mirarlo con miradas de actualidad. Si resulta que porque Franco suprimió la coeducación, para siempre jamás la coeducación ha de ser un elemento determinante, yo le digo que no. Si hay centros que funcionan, si hay familias que lo demandan, puede perfectamente formar parte de un proyecto, de una apuesta educativa. El debate sobre las escuelas que escolarizan a niños y niñas por separado forma parte del pasado.

-¿Va a paralizar el programa de introducción de ordenadores?

-En los centros en los que ya estaba previsto que llegasen, si tienen conectividad, llegarán.