La visita del jefe de la Iglesia católica

La policía investigará a los 6.500 invitados a la misa del Papa en Barcelona

El Papa es ovacionado en la plaza de San Pedro, en el Vaticano, el miércoles pasado, en la audiencia general semanal.

El Papa es ovacionado en la plaza de San Pedro, en el Vaticano, el miércoles pasado, en la audiencia general semanal.

JORDI CASABELLA / Barcelona

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El Arzobispado de Barcelona remitirá en los próximos días a las Fuerzas de Seguridad del Estado los datos personales de los 6.500 invitados que accederán al interior del templo de la Sagrada Família durante la ceremonia de consagración al culto de la basílica, que presidirá el Papa el próximo 7 de noviembre, y a la que únicamente podrán asistir las personas que tengan en su poder una invitación nominal cursada por la diócesis. La policía quiere disponer de esa información con varias semanas de antelación a la llegada de Benedicto XVI a Barcelona para poder analizarla y cotejarla de manera preventiva con sus archivos de datos.

El control afectará a 2.140 feligreses representantes de las parroquias; un millar de sacerdotes; 800 cantores; varios centenares de empleados en las obras y servicios del templo, que podrán acudir al evento con un acompañante, y los colectivos de religiosas, enfermos y mi-

nusválidos que podrán seguir la ceremonia en el área denominada por los servicios de seguridad zona cero. En ella estarán también las autoridades, presididas por los Reyes.

En la zona uno, el área exterior inmediata al templo, se colocarán 25.000 sillas (distribuidas a través de la avenida de Gaudí, las plazas de la Sagrada Família y de Gaudí y las calles de Sicília y de Provença). Los invitados a la zona uno podrán presenciar el acontecimiento por medio de grandes pantallas de televisión. Para acceder a esta área también será necesario un pase especial, aunque este no será nominal.

EL PÁRROCO DECIDE / El arzobispado ha dejado a criterio de los párrocos la distribución de invitaciones entre los feligreses para entrar en el templo. A cada parroquia se le han reservado 10 pases, cuya petición nominal hay que comunicar al arzobispado. Este remitirá la información a la policía y, una vez analizada, los fieles elegidos recibirán sus entradas personales.

En la parroquia de la Mare de Déu dels Desemparats, de L'Hospitalet de Llobregat, por ejemplo, se comunicó a los fieles, al final de la misa, que quien estuviera interesado podía rellenar el formulario de solicitud. En la parroquia de Sant Joan d'Horta, de Barcelona, el sacerdote ha dejado el reparto en manos del consejo pastoral, integrado por laicos que colaboran en la catequesis y los servicios que ofrece la iglesia.

Los Mossos d'Esquadra, encargados de la vigilancia del recorrido de Benedicto XVI por Barcelona, aguardan a que el arzobispado y el ayuntamiento acuerden el itinerario para iniciar el control de la población empadronada en las calles por las que discurrirá la comitiva.

Fuentes de la organización de la visita apuntaron que el recorrido que cuenta con mayores posibilidades es el que, desde la sede arzobispal de la avenida de la Catedral, donde habrá dormido la noche anterior Joseph

Ratzinger (su séquito se alojará en el Hotel Colón), enlaza la Via Laietana con Pau Claris, Casp y Marina, hasta la Sagrada Família.

VUELTA AL TEMPLO / Esta opción, preferida por el ayuntamiento, no es mal vista por el cardenal Lluís Martínez Sistach, entre otras razones porque el tramo inferior de la calle de Marina, con ocho carriles, permitiría que el Pontífice se diera un baño de masas. Cuando llegue a la Sagrada Família a bordo del papamóvil, el Papa dará una vuelta al templo, lo que repetirá al abandonarlo.