Irritación entre familias de Santa Coloma por el precio de la escuela de música: “Los alumnos se están borrando"

La irritación vecinal en Santa Coloma de Gramenet por el precio de la escuela municipal de música ya hace tiempo que colea. La gestión del equipamiento de enseñanza musical, ubicado en el privilegiado enclave de Can Roig i Torres, es foco de reclamaciones de una cincuentena de familias que han llegado a recoger unas 450 firmas para pedir una revisión del modelo, especialmente en lo relativo al precio del servicio. Las tarifas se han incrementado este 2024 un 2,5%, por debajo del IPC, tras años congeladas desde otra subida del 3% en 2020.

"Nuestra principal queja es que el precio nos parece elevado: sabemos que algunos alumnos se están borrando porque las familias no pueden asumirlo", explica Regina Urruticoechea, una de las madres que integra el colectivo de familias movilizadas.

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"O modernizan el modelo de gestión para que llegue a más gente o resulta inaccesible; nosotros tenemos que hacer un esfuerzo para que mi hijo estudie música", apuntala Salomé Águila, otra de las madres implicadas en la reivindicación.

Según datos del 2023 de la Diputación de Barcelona analizados por EL PERIÓDICO, Santa Coloma lidera —entre ciudades de la provincia de Barcelona de más de 50.000 habitantes— tres 'rankings': el de ciudades con un precio medio por alumno más elevado (1.039 € anuales); el de ciudades donde las familias financian mayor proporción del servicio (42%); y el de ayuntamientos que menor proporción del servicio financian (50%).

El Ayuntamiento de la ciudad del Barcelonès, sin embargo, matiza los datos. Primero, aludiendo a una "disminución drástica de la aportación de la Generalitat" como causa de mayor esfuerzo de consistorio y familias. Segundo, apelando al "mayor número de horas lectivas" del alumnado colomense. Y tercero, enfatizando la apuesta de un consistorio "con pocos ingresos y elevados gastos para atender las necesidades sociales" de un municipio con bajos niveles de renta.

"Poner mucho más del 50% comportaría necesariamente sacar esos recursos de otras políticas", sostienen fuentes municipales de Santa Coloma, que también destacan la "apuesta por las becas" de la administración local: "Hemos aumentado el umbral de renta para que las becas alcancen también a familias que con las subidas de los precios han visto sus rentas considerablemente reducidas". Específicamente, el consistorio precisa que el importe total de las becas ha pasado de 5.000 a 8.000 y 12.000 euros en el presente curso.

"Es cierto que el Ayuntamiento de Santa Coloma abre convocatorias para acceder a becas, pero lo que pedimos nosotros es que se establezca una tarifa social que determine la cuota en función de la renta de cada familia", señala Urruticoechea. Grandes ciudades como Terrassa, Sant Cugat del Vallès o Rubí, además de Barcelona, ya tienen en marcha tarifas sociales.

El asunto llegó también al Pleno municipal colomense, donde ERC ha vertebrado el malestar vecinal. "Muchas familias nos trasladan su preocupación por la presión que supone el coste de la educación musical de sus hijos", afirmó el concejal Sam Núñez (ERC) en la sesión plenaria dedicada a las ordenanzas municipales.

En su momento, el Gobierno municipal de Santa Coloma (PSC y Ciudadanos) ya apeló a la caída de financiación de la Generalitat —de un 33% a un 5% en unos diez años, explicó la tenienta de Alcaldía Blanca Padrós (PSC)— para justificar por qué las familias pagan más. Los datos de la Diputación muestran que, de entre las grandes ciudades que participan en la estadística de la administración provincial, Santa Coloma es la segunda gran urbe que más financiación recibe de otras administraciones (9%) por detrás de Mataró (11%).

"Estoy muy contenta con los profesores, pero nos cuesta pagar"

La mayoría de familias entrevistadas explican que su enfado gira en torno al precio de la escuela de música y su modelo de gestión, pero enfatizan estar satisfechos con la calidad educativa del centro y el profesorado.

"Estoy muy contenta con los profesores y con las instalaciones del centro", asegura una madre y exalumna que pide anonimato. "Pero es cierto que estamos teniendo dificultades para llegar a pagar las cuotas, ya que además son alumnas mis dos hijas", asume.

Álex Benavente, padre de otros dos alumnos de ocho y seis años, agrega a la queja en torno al precio otra sobre "cierta desorganización" en el centro. Por ejemplo, Benavente apunta a carencias en cuanto a la conciliación: "A veces no tienen en cuenta que los niños los tenemos en otras extraescolares y nos cuesta conciliar", comenta el padre. "No quiero que sea sólo más barato para mí, sino sobre todo para la gente que menos puede permitírselo", subraya Benavente.

Por su parte, Salomé Águila pone el acento en que "la música no puede estar únicamente al alcance de quienes tienen un mínimo poder adquisitivo". "Si la comparo con otra actividad extraescolar, por ejemplo atletismo, donde durante todo el año pagamos unos 150€, hay una gran diferencia", señala la madre.

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