CLAVES | Así es el limbo en el que 'vive' una escuela pública de Sant Cugat tras una denuncia ecologista

La escuela La Mirada se tenía que construir en el bosque de Volpalleres algo que quedó paralizado en los tribunales hace justamente un año. El 15 de noviembre del 2022, el juzgado contencioso-administrativo número 10 de Barcelonaparalizó cautelarmente las obras -que habían empezado el mismo mes- fruto de un recurso presentado por de la Associació per la Defensa i l'Estudi de la Natura (ADENC). Un año más tarde, este 20 de noviembre, se ha hecho pública una sentencia -aún no definitiva-, en qué la juez ha anunciado la desestimación del recurso interpuesto por los ecologistas que querían paralizar la fase inicial del proyecto. Concretamente, el recurso se focalizaba en el rechazo del trasplante de árboles del bosque.

En la sentencia, que aún no es firme -ya que se ha recorrido-, la jueza manifiesta que el trasplante de árboles, objeto de la polémica, es "necesario" para que se pueda aplicar una modificación urbanística del todo "válida" que incluye la construcción del centro educativo en el entorno del bosque. Por lo que desestima el recurso de los ecologistas.

En este sentido, el dictamen deja claro que el acuerdo municipal de aprobación del proyecto básico y ejecutivo de la escuela son "vigentes y ejecutivos", de tal modo que el trasplante de árboles se convierte en "instrumental": "No habrá ejecución del proyecto ejecutivo sin desplazamiento del arbolado de la parcela", dicta la sentencia

Los ecologistas no tardaron en reaccionar y al día siguiente de la publicación de la sentencia -el pasado martes, 21 de noviembre- anunciaron a través de un comunicado la presentación de un recurso de apelación al Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC). Este movimiento supone que se alarguen las cautelares (algo sujeto a la Ley 29/1998) y, también, que el TSJC determine uno de los dos posibles escenarios. Por un lado, desestimar el recurso de apelación o, por otro lado, aceptarlo a trámite -y emitir una nueva sentencia-.

Cabe recordar que aparte del recurso contra el trasplantado del arbolado (donde hay el foco mediático fruto de la novedad judicial) existen dos procedimientos judiciales más abiertos por parte de los ecologistas en el TSJC: por un lado, con referencia al proyecto de construcción y, por otro lado, con relación a la modificación urbanística.  

El comunicado, conjunto con SOS Bosc Volpelleres y WWF Barcelona, hace referencia a la actual situación medioambiental y a la necesidad “urgente” de buscar una nueva ubicación: “Con la situación de excepcionalidad a causa de la sequía y los períodos a los que se prohíbe actividades de tala en el bosque, cuyo trasplante quedaría aplazado por un período indeterminado, motivos por los que hacemos un llamamiento a iniciar las actividades urgentemente para construir la escuela a una alternativa que permita conservar la integridad del bosque y acabar con esta crispación de la ciudadanía”.

La primera reacción de la sentencia fue la de las familias de la propia escuela. Justamente el día en qué el dictamen se hizo público, Sant Cugat celebraba un Pleno Municipal -donde se aprobaron de forma inicial los presupuestos para 2024- y la Asociación de Familias de Alumnos (AFA) durante la audiencia pública de la sesión plenaria reclamaron al alcalde de Sant Cugat, Josep Maria Vallès, “el inicio de la construcción de la escuela sin perder más tiempo", quien respondió que la solución sería conjunta y que “hablarían con la AFA esta misma semana para explicar la solución final”. La comunidad educativa celebraba la emisión de sentencia y la calificaron como "un paso importante” para la construcción en el bosque y para su proyecto educativo. 

Por otro lado, la AFA también insistió en la mejora de la situación de la escuela que se encuentra en módulos desde hace ocho años (2016). Un estado que tildan de “precario”. Así, a través de una carta, la comunidad educativa de la escuela La Mirada ha solicitado a la consellera d’Educació, Anna Simó, ayuda para: la financiación para conseguir un espacio con cocina, la tramitación de la instalación de dos módulos adicionales antes del inicio del próximo curso y la salvaguarda para asegurar que se construya el edificio definitivo para la escuela en el bosque de Volpelleres.

El Ayuntamiento de Sant Cugat del Vallès, por su parte, manifiesta que está analizando la documentación y prevé posicionarse próximamente al respecto. Más allá de la respuesta en la audiencia pública, aún no se ha mostrado una “solución final”. De todos modos, cabe recordar que el consistorio presentó una moción institucional aprobada por todos los grupos políticos que apostaban y se comprometían a construir La Mirada con la "máxima celeridad posible", a finales de septiembre. 

Además, durante el inicio del curso escolar, el Gobierno Municipal propuso una alternativa -al bosque- a construir el esperado centro educativo. Así, bautizó el terreno que actualmente ocupa el aparcamiento junto al centro educativo -el que se uniría a otros terrenos adyacentes- como posible ubicación alternativa.