Trombosis venosa

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Las varices inflamadas pueden provocar tromboflebitis.

Las varices inflamadas pueden provocar tromboflebitis. / EL PERIÓDICO

Beatriz Pérez

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La cantante Isabel Pantoja ha recibido el alta hospitalaria del hospital de Córdoba en el que ingresó de madrugada por problemas de salud. El pasado abril ya tuvo que cancelar un concierto por motivos de salud que no trascendieron. Pese a que el comunicado oficial no especifica qué dolencia tiene, desde su entorno se ha filtrado que la tonadillera padece lo que comúnmente se denomina tromboflebitis, si bien académicamente los médicos se refieren a esta patología como "trombosis venosa".

"La trombosis venosa puede darse en las venas profundas o en las superficiales. En las superficiales sucede cuando, por ejemplo, se inflama una variz o una vena tras una analítica de sangre o la infusión de medicamentos", explica a EL PERIÓDICO el doctor Sergi Bellmunt, jefe de Cirugía Vascular del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona y presidente de la Societat Catalana de Cirurgia Vascular. Aunque se desconoce con detalle lo que le ocurre a Isabel Pantoja, Bellmunt entiende que su afectación es en las "venas profundas". "En este caso se presenta, principalmente, en las venas de las piernas", prosigue.

Cuando la trombosis se produce en las venas profundas, los especialistas diferencian entre aquella patología provocada por un factor desencadenante y la que aparece porque sí, sin causa aparente. Por ejemplo, entre las causas de las trombosis venosas provocadas está el reposo tras una operación de cadera, la ingesta de anticonceptivos o también viajes largos en avión (esta es la denominada "enfermedad del turista"). También puede estar relacionada con el cáncer, problemas de coagulación o incluso causas genéticas.

Sin saber el origen

Sin embargo, el 50% de las veces se desconoce el origen de las trombosis venosas. "Y nos quedamos con las ganas de saberlo, ya que esto es importante porque, dependiendo de cuál sea el factor, sabemos la probabilidad que hay de que vuelva a pasar", explica Bellmunt.

En todo caso, se conozca o no la causa, el tratamiento es el mismo: la descoagulación con heparina o anticoagulantes, entre ellos el conocido sintrom. El tratamiento está encaminado a evitar complicaciones, que pueden ser inmediatas o tardías. "Hay una complicación inmediata, que es que el trombo se desplace, vaya al pulmón y provoque una embolia pulmonar", avisa este médico, que también advierte sobre el peligro de retirar el tratamiento antes de tiempo, sobre todo si el factor que lo provocó es grave o persiste. "Hay riesgo de volver a hacer trombosis, es decir, de retrombosis. De hecho, a las personas que tienen mucho riesgo de volverlo a sufrir una trombosis les dejamos el tratamiento para toda la vida o hasta que el factor desencadenante desaparezca o se controle". Estos son los tratamientos que se dan en la fase aguda, que deben durar como mínimo entre tres y seis meses.

Además, también hay complicaciones a largo plazo, que es el síndrome postrombótico y que se produce cuando el trombo de las venas no se reabsorbe o daña la vena afectada. "Suele ser una secuela de la gente que ya ha tenido un trombo en las venas, que provoca molestias, edemas, afectaciones cutáneas e incluso úlceras", cuenta este médico. Estas personas necesitan llevar medias elásticas, de comprensión, en las piernas, tanto para controlar los síntomas como para evitar que esta secuela se agrave con el tiempo.