Institut Català d'Oncologia

Una vecina de Sant Roc descubre con un test genético por qué su madre y sus tías sufrieron cáncer: "Me quité los ovarios al saber que tenía la mutación"

Mari Carmen, de etnia gitana, anima a su comunidad a hacerse pruebas para detectar alteraciones del gen BRCA-1: "Entre nosotros el porcentaje mutación es muy alto"

El ICO detecta en las mujeres gitanas una mutación genética que eleva la predisposición a sufrir cáncer de mama

Catalunya avanzará a los 45 años las mamografías de prevención del cáncer de mama

Mari Carmen, vecina del barrio de Sant Roc de Badalona, frente al CAP.

Mari Carmen, vecina del barrio de Sant Roc de Badalona, frente al CAP. / Manu Mitru

Beatriz Pérez

Beatriz Pérez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

En 2018, Mari Carmen, vecina de 46 años del barrio de Sant Roc de Badalona se sometió a una operación para extirparse los ovarios. Tomó esta decisión al conocer que tenía una mutación del gen BRCA1, que está altamente asociado al desarrollo de cáncer. Las mujeres que tienen esta mutación genética tienen un 80% de posibilidades de tener un tumor de mama y un 40% de tener un tumor en los ovarios.

La madre de Mari Carmen falleció de cáncer de mama. Sus dos tías también lo tuvieron. Ante esta realidad, los médicos le recomendaron realizarse una prueba genética (consistió en un análisis de sangre) y ahí descubrieron que efectivamente ella tenía una mutación en el gen BRCA1. También se la hizo, a la vez, otra tía suya y también dio positivo.

"Como medida de prevención, decidí quitarme los ovarios, ya que ya había tenido hijos. Y los pechos no decidí quitármelos... hasta que tuve cáncer en una mama", cuenta. Esto último fue en 2021. Años atrás, estando sana, se le hizo muy difícil tomar la decisión de someterse a una doble mastectomía (como la que pasó la actriz Angelina Jolie hace 11 años al conocer que tenía esta mutación) y no lo hizo hasta que contrajo la enfermedad.

Mari Carmen es de etnia gitana. El Institut Català d'Oncologia (ICO) arrancó en 2022 un programa de cribados entre esta comunidad del barrio badalonés de Sant Roc para confirmar lo que sospecha su Unitat de Consell Genètic: que, entre la población gitana, la mutación del gen BRCA1 es más recurrente que en el resto. Los resultados preliminares de este proyecto, el cual aún no ha acabado (el ICO ha cribado ya a 274 personas de etnia gitana de las 400 que busca), apuntan que la incidencia de esta mutación entre los gitanos es del 3,7%, frente al 0,1% del resto de la población.

"El mundo abajo"

Fue precisamente la Unitat de Consell Genètic del ICO la que le hizo esta prueba a Mari Carmen. "Desde que supieron que tenía esta mutación, me hacen controles cada seis meses. Fue ahí cuando me detectaron, muy rápido, el tumor en la mama. Gracias a que me lo pillaron a tiempo, no tuve que hacer ni quimio", narra Mari Carmen desde el CAP Sant Roc. "Me hicieron la reconstrucción al momento. Estoy súper agradecida y me encuentro bien", cuenta esta paciente que no hace más que recomendarle a todo el mundo del barrio que se haga la prueba. Hace poco se la hizo una prima suya, siguiendo su consejo. "Di positivo y se me vino el mundo abajo", relata. Pero es consciente de que es mejor tener esta información que vivir de espaldas a ella.

Es por eso que Mari Carmen ha participado en vídeos hechos por el CAP Sant Roc y el ICO para concienciar a la comunidad gitana, donde no se pronuncia la palabra "cáncer" por miedo a atraerla, de que se haga la prueba.

Los hombres pueden también tener una mutación del gen BRCA1 y, en este caso, el riesgo acumulado de tener cáncer de mama es del 6% y de cáncer de próstata, un 20%.

"El porcentaje [de personas de etnia gitana con esta mutación] es muy alto. La gente se tiene que concienciar", concluye Mari Carmen. Defiende que estos cribados, que aspiran a consolidarse entre la comunidad gitana, son la mejor herramienta de diagnóstico precoz del cáncer.

Suscríbete para seguir leyendo