Alimentación

El brócoli: tu aliado inesperado contra enfermedades graves

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Qué está pasando con el brócoli y por qué hacer esto con él puede salvarte de una enfermedad

Qué está pasando con el brócoli y por qué hacer esto con él puede salvarte de una enfermedad / PIXABAY

Abril Escalante

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El brócoli es con toda probabilidad una de las mejores verduras que podemos incorporar a nuestra dieta: las razones han convertido a este ingrediente en uno de los pilares del culturismo, ya que se trata de un alimento con muy pocas calorías, pero muy rico en fibra y en antioxidantes que también supone un aporte significativo de varias vitaminas y minerales.

Su aporte resulta tan positivo que ha sido considerado como un 'superalimento' y su consumo puede contribuir positivamente a la lucha contra varias enfermedades: ayuda a la prevención del cáncer, al fortalecimiento de los huesos, el refuerzo del sistema inmunitario y la salud cardiovascular.

La forma correcta de lavar el brócoli

Pero como con cualquier alimento, antes de lanzarnos a preparar cualquier cosa primero tenemos que atender muy bien a la seguridad alimentaria. En el caso del brócoli, aunque se trata de una verdura que pasa estrictos controles sanitarios antes de ponerse a disposición de los consumidores en supermercados y verdulerías, hay un elemento con el que tenemos que contar: y es que para eliminar los restos de insectos, lombrices y todo tipo de bichos que puedan venir ocultas en sus frondosas ramas, tenemos que lavar el brócoli de la forma correcta.

Lavar la verdura no es, ni mucho menos, un capricho: con esta sencilla práctica de higiene culinaria no solo nos aseguramos de haber eliminado de la comida los restos de pesticidas que puedan quedar, sino que también nos curamos en salud para no encontrarnos a un invitado indeseable en la mesa.

Si no lavamos el brócoli correctamente, nos podemos encontrar con la desagradable situación de encontrar algún insecto oculto entre sus ramas.

Para lavar correctamente el brócoli primero tenemos que mezclar tres partes de agua por una de vinagre. Una vez que tengamos esta solución preparada, sumergimos el brócoli y lo dejamos actuar durante 20 minutos: gracias a esto, las propiedades desinfectantes del vinagre blanco harán que el brócoli quede completamente limpio. Por último, hay que enjuagar la pieza con agua fría y dejar que se seque completamente.