"No se ve un final": la ONU alerta de un nuevo récord de gases de efecto invernadero

La concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera alcanzó un nivel récord el año pasado, ha informado este miércoles la Organización Meteorológica Mundial (OMM), advirtiendo de que "no existe un final a la vista" para esta tendencia.

La advertencia se produce en vísperas de que los líderes mundiales se reúnan en Dubái para la conferencia anual sobre el clima COP28 de la ONU, en la que los gobiernos presionarán para lograr una mayor acción climática, incluida una posible eliminación gradual de los combustibles fósiles antes de 2050.

En 2022, las concentraciones medias globales de dióxido de carbono estuvieron un 50% por encima de las de la era preindustrial por primera vez, ha asegurado la agencia meteorológica de la ONU.

"En la dirección equivocada"

"A pesar de décadas de advertencias de la comunidad científica, miles de páginas de informes y docenas de conferencias sobre el clima, todavía vamos en la dirección equivocada", ha afirmado el secretario general de la OMM, Petteri Taalas.

Taalas ha insistido en que concentraciones más altas de gases de efecto invernadero están relacionadas con fenómenos climáticos más extremos, incluidos calor y lluvias intensas, derretimiento del hielo, niveles más altos del mar, así como calor y acidificación de los océanos.

"Aproximadamente la mitad del planeta se ha enfrentado a un aumento de las inundaciones, y un tercio del planeta ha afrontado un incremento de las sequías", ha afirmado Taalas. "Y esta tendencia negativa continuará hasta la década de 2060". "Debemos reducir urgentemente el consumo de combustibles fósiles", ha añadido.

Calentamiento global

Las concentraciones de metano en la atmósfera también han aumentado, y los niveles de óxido nitroso, otro gas de efecto invernadero, experimentaron el mayor aumento interanual registrado entre 2021 y 2022, dijo la OMM.

Los gases de efecto invernadero son responsables del calentamiento del planeta y de desencadenar fenómenos meteorológicos extremos. A diferencia de las emisiones que pueden reducirse, gran parte del dióxido de carbono emitido hace décadas permanece en la atmósfera y activa procesos lentos como el aumento del nivel del mar.

"Se necesitan miles de años para eliminar el carbono del sistema una vez que se emite a la atmósfera", ha asegurado Taalas.

Otro informe ha apuntado esta semana que los gobiernos estaban logrando avances insuficientes en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero para evitar los peores impactos del calentamiento global.