‘Hot spot’ de postureo

El puente de Barcelona con las vistas panorámicas de los búnkers (y sin guiris)

Es el puente de Mühlberg de Can Baró, la alternativa viral al Turó de la Rovira. Las nuevas vistas de moda para los corredores

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El puente de Mühlberg y sus vistas instagrameables.

El puente de Mühlberg y sus vistas instagrameables. / JORDI OTIX

Abel Cobos

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Turó de la Rovira, búnkers del Carmel o las baterías antiaéreas. Varios nombres para el mismo sitio: el mirador de ‘A tres metros sobre el cielo’, perennemente atestado de turistas que llegan en avalancha. El porqué de la masificación es obvio: los miles de vídeos e imágenes de sus privilegiadas vistas hacen que se convierta en un punto peregrinación con más feligreses que Compostela. Y, precisamente, estas hordas de turistas son las que no permiten disfrutar con paz de esta estampa bucólica. 

¿Buscando un plan B para una cita veraniega con vistas? No eres el único. Por eso, en las últimas semanas se ha hecho viral el puente de Mühlberg, una enorme edificación metálica construida en 1991 para conectar la calle Mühlberg con el Parque del Guinardó y mejorar la comunicación del barrio. 

Situado justo a los pies del Turó de la Rovira, tiene vistas prácticamente iguales a los búnkers: una panorámica del Eixample y de la costa barcelonesa, de río a río. Y encima, sin el murmullo de los centenares de turistas que lo visitan cada día. Un rincón que los locales están reclamando para no prescindir de disfrutar de esas vistas por culpa de la gentrificación que ha impregnado la zona. 

El puente, además, se ha convertido en un enclave deportivo. Situado entre el parque del Guinardó y el del Carmel, forma parte del recorrido habitual de decenas de ‘runners’ que quieren correr con vistas espectaculares de la ciudad, para hacer que el rato sudando sea más agradable. Ambos parques están llenos de miradores (como el del Nen de la Rutlla, en el Guinardó, o el de Ignasi de Lecea, en el Carmel). Bienvenidos a la ruta de ‘running’ más instagrameable de Barcelona.