QUÉ HACER HOY EN BARCELONA
Un festival raro, raro, raro...
El BCN Improfest ofrece una exposición sobre una cacatúa y un concierto con bacterias
Eduardo de Vicente
Periodista
Uno de los nuevos géneros teatrales que más éxito está teniendo últimamente es el de la improvisación, con montajes tan brillantes como el espectáculo Impro Side Story o las iniciativas del grupo Planeta Impro, por ejemplo. Pero esta técnica puede aplicarse también a muchas otras artes. Para demostrarlo, se celebra esta semana en la ciudad uno de los certámenes más originales, el BCN Improfest, que llega ya a su sexta edición donde las sorpresas siempre están presentes. Para ello convoca a diferentes tipos de artistas de la escena que aportan sus respectivas particularidades. En el mismo han participado hasta la fecha nombres importantes como los de la coreógrafa Sol Picó, el poeta y pensador Bartolomé Ferrando, el saxofonista británico Dave Jackson o la pianista italiana Silvia Corda.
Los actos se celebrarán en el Centre Cultural Albareda y el tema de este año es muy novedoso, ya que trata de la Bio Música o Interespecies, es decir, la relación artística entre humanos y animales. Desde esta misma tarde (19.30 h.) y hasta final de mes puede visitarse la exposición Pipocarlitos, dedicada nada menos que a ¡una cacatúa ninfa! que acaba de rodar un largometraje con el director Enric Ribes (Las azoteas también cantan), ha participado en varios conciertos con la orquesta Freet’s de Lleida o con el Quartet Dadà en Castellón, así como en algunas performances en el Obrador de Filosofía de la Sala Beckett.
Una cacatúa artista
Es la mascota del artista multidisciplinar y multiinstrumentista, Miquel Jordà, que adquirió hace un año y medio por Internet a una pareja de jóvenes cuando tenía muy pocos días de vida. Se trata de un animal papillero, nombre que recibe porque su amo le da la papilla con jeringuilla y mantiene con él una relación casi paternal. Le puso de nombre Carlitos, pero él siempre saluda a la gente llamándoles Pipo y de ahí el nombre. Estos ejemplares, de origen australiano, tienen la particularidad de que pueden memorizar canciones silbando y, así, puede interpretar la sintonía de El Gordo y el Flaco o La familia Monster.
Pipocarlitos tiene aspiraciones poetico-artísticas. Nunca ha tenido jaula y aunque vive en un piso, tiene libertad para volar por su entorno. Desde su infancia se acostumbró a salir a la calle, a pasear en bicicleta o a volar por la playa, por lo que es muy sociable, le gusta la gente y la música. ¿Quién no recuerda al enano de jardín que posaba en diferentes ciudades en la película Amélie?, pues Pipocarlitos hace algo parecido. En la muestra podremos ver algunas de sus reivindicativas fotos de su página de Instagram, realizadas entre grafitis y pintadas, por su mejor amigo, Miquel Jordà,.Todo ello incluido en una instalación creada con material reciclado por Judith Cunillera y con textos de Iván Bercedo. Esta inauguración culminará con una performance a modo de acción sonora plástica biomusical donde podremos escuchar a Pipocarlitos mientras los artistas Montserrat Malfany y Joan Vinuesa interpretarán sus cantos y sonidos.
Sonidos de pájaros y cultivos de bacterias
El resto de actividades tendrán lugar este sábado, día 13, encuadrados en el marco de un concierto totalmente inusual que se iniciará, también, a las 19.30 horas. Para empezar podremos ver la videoinstalación que han creado los colombianos Diana Medina y Daniel Pedrahita. Para la misma han hecho grabaciones de pájaros en dos lugares distintos de Colombia: Honda y Villa de Leyva. Con ella pretenden experimentar en vivo por medio de tratamientos analógicos y digitales para improvisar una pieza sonora que parta de los mismos cantos y evolucione sonoramente en el tiempo.
Les seguirá el contrabajista Rafa Esteve, que ha creado una pieza sonora sobre el cambio climático y sus efectos en la vida animal, con la ayuda de Antoni Robert. Paralelamente, Luis López Casero presenta, Sonobacter, una improvisación con saxo, clarinete, la flauta de Marina Buj, la participación de los bailarines del grupo Atotaixodansa y ¡cultivos de bacterias! Este proyecto pretende escuchar a estos microorganismos por medio de unas celdas de combustible microbianas capaces de generar corriente a partir de sus procesos metabólicos bacterianos que se transformarán en música algorítmica. Su propio autor nos lo explica.
Inspirándose en los búfalos
La formación Atotaixodansa, compuesta por una decena de bailarines, participará también en la última actividad junto a Nuumu Code, un grupo de improvisación musical cuyos miembros interpretan diversos instrumentos como guitarras, bajo, batería, saxo, teclados, diversos objetos y lo más importante, la voz. Aprovechando que acabamos de entrar en el año chino del búfalo, nos proponen una actuación donde estos animales adquieran todo el protagonismo. Así, los músicos improvisarán a partir de imágenes y sonidos de búfalos en libertad. Cacatúas silbadoras, música de bacterias o sinfonías con búfalos, una experiencia bioriginal. Un festival raro, raro, raro… tan marciano que dan ganas de pasarse por allí para descubrir qué puede salir de todo esto… ¿A que sí?
- Cambio de horarios en los colegios de España: malas noticias para los padres
- El apellido de origen gitano que tienen más de tres millones de españoles
- Barcelona suspende el 'Correfoc' de las fiestas de Gràcia 2024 por una grave desavenencia entre 'colles
- El Mundo Today | Cierra un club cannábico de Barcelona porque sus clientes son incapaces de recordar dónde está
- Los Mossos creen que los agentes detenidos abusaron de su 'conocimiento' en 'protección de personalidades' para facilitar la fuga de Puigdemont
- Una vaguada de aire frío amenaza con traer fuertes tormentas y una bajada de las temperaturas en las próximas horas
- Carlos Sobera, sorprendido tras conocer el trabajo de una soltera de 'First dates': 'Espero no verte más
- El Burger King paralizado por sus trabajadores tras superar los 34 grados llevaba desde abril con la refrigeración averiada