Entre Palamós y Palafrugell

La mejor playa del mundo

La ruta hacia Cala Estreta permite descubrir uno de los pocos espacios de la Costa Brava que ha escapado del ladrillo

El epicentro se ha situado, concretamente, a unos cincuenta kilómetros de la costa de municipios como Palamós.

El epicentro se ha situado, concretamente, a unos cincuenta kilómetros de la costa de municipios como Palamós.

DAVID CÉSPEDES

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Existen todavía en la Costa Brava algunos puntos vírgenes donde la presencia humana es bastante limitada. Eso permite disfrutar de pequeños rincones y playas donde aún se puede apreciar la naturaleza en todo su esplendor. La playa de Cala Estreta, al lado de Castell en Palamós, es un ejemplo de la conservación de algunos puntos del litoral gerundense. 

Recientemente, Cala Estreta acaba de ser incluida en la lista de las 100 mejores playas del mundo. La popular editorial de viajes Lonely Planet, con un importante reconocimiento en el sector turístico, ha publicado un listado con las que se consideran las mejores playas de todo el planeta. El conjunto compuesto por cala Estreta dentro del espacio de interés natural Castell-Cap Roig forma parte de este selecto grupo de playas. Precisamente, se acaban de cumplir ahora 30 años del referéndum que se llevó a cabo para que los ciudadanos decidieran si querían que el paraje de Castell –único punto virgen de la Costa Brava– se sometiera a un proyecto de urbanización. Ganó el no y desde aquel momento, esta zona del litoral cuenta con una mayor proyección y el ladrillo no ha tenido protagonismo, a diferencia de otros puntos de la costa gerundense.

Para conocer este agradable rincón de la costa se puede hacer una pequeña ruta a pie. Según nos explican desde Caminant.cat, una de las mejores rutas que se pueden hacer por la Costa Brava dedicándole poco tiempo es salir de Castell para llegar a medio camino entre Palamós y Palafrugell. Se sale a los pies de uno de los poblados ibéricos que se conservan en el litoral y con unas características muy especiales. Se puede realizar una ruta tranquila que no nos llevará más de hora y media. En la ficha que se incluye en la descripción se detalla que la dificultad de la ruta es fácil, aunque en algún tramo hay zonas de desnivel de piedras. Son únicamente 4,3 kilómetros de recorrido, en un sentido, con una altura máxima de 70 metros. Cala Estreta es una zona totalmente natural donde a lo largo del recorrido no encontraremos ninguna edificación, a diferencia de otras playas. 

Cala Estreta es una playa natural donde no hay ningún servicio ni equipamiento. Sus aguas son cristalinas y la zona de arena es de unos cien metros. Y si por la superficie es espectacular por debajo del agua todavía gana más enteros. Su fondo marino es espectacular. Para contemplarla y disfrutarla.