Ruta

Catalunya, tierra de senderos

A lo largo del territorio se extienden hasta 12.000 kilómetros de caminos que permiten sumar y unir actividad física y conocimiento del pasado

Senderisme exercici físic i coneixement del territori

Senderisme exercici físic i coneixement del territori / EPC

David Céspedes

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La Federació d’Entitats Excursionistes de Catalunya define los beneficios de los senderos como la suma de la actividad física más el conocimiento del país, sus bellezas naturales y sus huellas del pasado. Y así es, porque no hay nada como caminar para conocer, ya sea una ciudad o un paraje natural. Los senderos en Catalunya conforman una red de más de 12.000 kilómetros.

Su mantenimiento, desde la señalización hasta la descripción de las rutas, corre a cargo de los clubs y entidades que conforman la federación. Ellos son los que, con su responsabilidad y compromiso, permiten que Catalunya sea un referente a nivel internacional y que sus caminos y senderos sean motivo de atracción para muchos excursionistas extranjeros. Los cuidadores de los senderos son las 106 entidades repartidas por todo el territorio catalán, los más de 300 federados y federadas que son socios y socias de los clubs y entidades excursionistas. Su trabajo merece el máximo reconocimiento posible.

Esta amplia red de caminos no brinda muchas posibilidades Por ejemplo, consultando la web de la Federació d’Entitats Excursionistes de Catalunya se nos abre un gran abanico de rutas. Una de las destacadas en primer lugar es la bautizada como GR1 Sendero Histórico. Se trata de una ruta larga que no se completa en un solo día, sino que son diez jornadas las que se necesitan para completarla (aunque, evidentemente, se pueden realizar tramos de manera individual). La gran ruta descrita va desde la comarca del Alt Empordà hasta Osona. Concretamente, desde Sant Martí d’Empúries, tierra de entrada de las civilizaciones griegas y romanas, hasta Alpens, la zona montañosa por excelencia de la comarca de Osona. Durante este largo recorrido pasaremos por diferentes poblaciones y núcleos, como Camallera, Banyoles, Besalú, Oix, Sant Pau de Segúries, Sant Joan de les Abadesses, Ripoll y, finalmente, Alpens. Toda la ruta está perfectamente descrita gracias al trabajo de los miembros de los diferentes clubs y entidades. Lo hacen de manera voluntaria y sin su aportación estos caminos, quizás, ya habrían desaparecido. En la web de la federación se describen diferentes rutas. Las posibilidades son infinitas y se adaptan a todas las condiciones físicas y preparación de los excursionistas. Los Pirineos tienen un papel destacado, pero las rutas tienen el valor de que se extienden por toda Catalunya.