Manresa invita a ver fósiles y minerales

El Museu de Geologia Valentí Masachs dispone de un fondo de más de 10.000 piezas en el campus de la UPC de la capital del Bages

Museo de Geología Valentí Masachs.

Museo de Geología Valentí Masachs. / MIREIA ARSO

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El Museu de Geologia Valentí Masachs de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) está situado en la Escuela Politécnica Superior de Ingeniería de Manresa. Los domingos, de las once de la mañana a las dos de la tarde, se puede visitar, excepto en julio y agosto, Navidad y Semana Santa. Y se pueden concertar visitas por grupos. Dispone de un fondo de unos 5.000 minerales, unas 2.000 rocas y unos 3.000 fósiles. El fondo se ha formado principalmente con muestras buscadas por los propios miembros del equipo del museo, donaciones de colecciones particulares, intercambios y algunas adquisiciones que se han realizado. 

El centro fue fundado en 1980, y el doctor Valentí Masachs Alavedra fue su primer director. Con su colección particular de fósiles y minerales junto con las muestras de minerales recogidas por los propios miembros del museo, se montaron las primeras vitrinas de mineralogía y paleontología con las que se inauguró. En 1993, se incorporaron las vitrinas de aplicaciones de los minerales que marcaron una nueva etapa en el ofrecimiento docente del museo a alumnos y profesores de todos los niveles de enseñanza, completado en 1995 con nuevos expositores sobre la utilidad de los materiales pétreos. A mediados de 2007, el museo abrió un acceso directo a nivel de la calle de Bernat de Cabrera, que da al espacio Área de Reflexión, donde alumnos y visitantes pueden aprender y reflexionar sobre tres propuestas: La Tierra se agota; Radioactividad: pros y contras; Minerales y Personas.

Entre las colecciones más notables están la de Josep Lluís Serch Valls, que entró en 1983 y está formada por unos 100 minerales procedentes básicamente de Andalucía y Extremadura, de mucho interés geológico, y la de Carles Curto Milà, que se incorporó en 1991 y está formada por 216 minerales de todo el mundo con una calidad extraordinaria y de gran valor científico. Otra de las importantes es la de Josep Closas Miralles, que ingresó en 1997 y cuenta con un legado constituido por 2.300 minerales y rocas, con piezas de buena calidad, algunas de gran rareza y otras de interés geológico-mineralógico.

Finalmente cabe destacar la colección recogida por Jaume Serrate e incorporada al museo en 2002, un conjunto de unos 1.200 minerales con muestras de mucha belleza e interés didáctico, utilizadas habitualmente en las aulas.