Paneque: "La conexión de la alta velocidad con el aeropuerto de Girona es absolutamente imprescindible"

¿El Gobierno se ha puesto a disposición para acoger a refugiados ante la situación en Canarias?

Hemos trasladado la voluntad de ser solidarios y colaborativos frente a una situación dramática. Se habla de cuotas de migrantes como si fueran mercancías y debemos recordar que detrás hay personas que vienen de situaciones de mucha vulnerabilidad. Catalunya es tierra de acogida, aunque también debe haber una regulación. Pido que haya un debate sereno y una respuesta humanitaria.

¿Cree que la respuesta del alcalde de Tossa de Mar ante la acogida de 200 personas migrantes responde a esta filosofía?

No voy a entrar a valorar declaraciones concretas. Lo que sí hizo el presidente Illa fue ponerse en contacto con el alcalde para ponerse a disposición de acompañar o ayudar en aquellas cuestiones que considerase que podíamos hacer.

¿Es imprescindible la conexión de la alta velocidad con el aeropuerto de Girona?

Es absolutamente imprescindible.

El parque eólico marino del golfo de Roses o el de L'Albera, cerca de espacios protegidos, son de los que generan mayor oposición. ¿Qué diagnóstico hace de la situación de las renovables en la provincia de Gerona?

Si Catalunya está en la cola, las comarcas de Girona está en la cola de la cola. Hay que impulsar la transición Girona, en Ponent y en todas las demarcaciones. Hay una serie de proyectos que impulsaremos. En el caso de la eólica marina, está previsto desarrollar una plataforma experimental para conocer los impactos en un entorno como el golf de Roses.

¿Es una prioridad este laboratorio de pruebas?

Sí, lo impulsaremos de forma decidida y urgente. La transición energética es importante en el ámbito ambiental, pero también económico. Las inversiones irán donde haya energía verde.

Usted se quedó sola en el grupo municipal del Ayuntamiento de Girona en el momento más difícil del PSC. ¿Le ha costado dejarlo?

Para mí es un gran honor formar parte de este gobierno, porque abre una nueva etapa en Catalunya y, por tanto, para mí es un honor y una gran responsabilidad. Debo decir que en el momento en que dejo el acta de concejala, en el ámbito personal y emocional, me cuesta en el sentido de que han estado desde 2011 hasta ahora muchos años de trabajo, desde la proximidad, desde las calles de Girona, muy implicada incluso durante un año y medio como primera teniente de alcalde y, por tanto, si hay un componente emocional y personal muy importante. Pero desde la Consejería, desde este gobierno podré desarrollar algo que ahora no podía hacer que sean políticas en favor de mi ciudad y de comarcas gerundenses. Sé que soy la consellera de toda Catalunya, pero hay cuestiones que desde la oposición no podíamos empujar y ahora sí que podré hacerlo.

¿Esta implicación que tiene el Govern y esta conselleria la hace compatible con poder volver a ser candidata en Girona?

Esta es una cuestión que ahora no me ocupa. Ahora tengo que estar absolutamente centrada en las responsabilidades que tengo, y más, como decís, amplias, y debo estar muy centrada en esta cuestión.

Lo digo porque en Girona el grupo municipal no se ha definido a un líder claro. Hay una especie de bicefalia entre dos concejales.

El nuestro también ha sido un proyecto muy colectivo y cuando me quedé sola como concejala, habría sido imposible haber reconstruido este proyecto sin la cantidad de personas, muchas de ellas anónimas, que han contribuido a ello. Por tanto, es un proyecto colectivo. La función principal del grupo municipal en Girona ahora es construir alternativa y se realizará con diferentes miradas. La palabra bicefalia, a mí no me gusta demasiado, pero siempre hay diferentes miradas y el apoyo de la propia agrupación de Girona. Esta es nuestra función. Son personas, con una competencia profesional muy elevada y estoy convencida de que harán este trabajo de reconstrucción, de alternativa del gobierno actual y, por tanto, muy convencida del trabajo que harán.

Usted nombró a su pareja como jefe de gabinete y acabó dimitiendo a los pocos días. ¿Se equivocaron con ese nombramiento o se equivocaron con la dimisión?

Alfons Jiménez es una persona que empezó a trabajar conmigo cuando no había ninguna relación personal. De hecho, él ya ha trabajado con el president Montilla, después con Anna Pagans, alcaldesa en ese momento. [Fue la sucesora de Joaquim Nadal]. Tiene una trayectoria política que le avala para ocupar un lugar como el que yo escogí de jefe de gabinete. Por trayectoria profesional y también porque es un cargo de confianza y él cuenta con mi confianza desde hace mucho tiempo. Y yo creo que los resultados en Girona, la victoria en Girona, avalan también ese trabajo que se hizo desde Girona y que él encabezó a nivel político. Ahora bien, cuando se hace el anuncio y a la luz de la respuesta que se generó de voces de la sociedad, ya no digo políticas porque estas al final siempre pueden tener un interés político, pero de la sociedad civil, puesto que trasladaron dudas sobre si el hecho de que hubiera una relación personal podía o no interferir si era o no adecuado, el señor Jiménez asumió esa decisión. Le parecía que su continuidad podía afectar a esta conselleria y este gobierno que ahora empezaba y, por tanto, fue una decisión que yo creo que le honra y que tomó a título personal.

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