Eduard Sallent recibió la suspensión de la plaza de mayor el mismo día que acabó la formación

El pasado 5 de julio, el entonces comisario jefe de los Mossos d'Esquadra Eduard Sallent anunció en una rueda de prensa sobre el dispositivo policial del verano, que había acabado el curso de mayor, obligatorio para ocupar esta plaza, que se desarrollaba en el Institut de Seguretat Pública de Catalunya. Sin embargo, ese mismo día se comunicó a los interesados la segunda resolución del Juzgado Contencioso Administrativo número 8 de Barcelona que suspendía de forma cautelar el proceso de selección, lo que también afectaba a esta formación, que queda ahora sin validez.

Desde principios de junio, el proceso de selección estaba parado de forma cautelar por el juzgado a instancias de un recurso del sindicato Sap-Fepol. Sin embargo, el Departament d'Interior consideró que Sallent podía seguir con la formación específica, ya que es preceptivo pasar el curso para tener la plaza de mayor. La administración catalana consideraba que se trataba de una decisión "cautelar" que, además, recurrió.

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Para justificar esta decisión, Interior envió al juzgado un calendario con las clases y la formación que recibía Sallent. Según ha podido saber este medio, el entonces comisario jefe recibió clases de inglés, de comunicación, de estrategia competitiva, de tecnología y de "liderazgo humanista", además de hacer prácticas formativas en Bruselas, Londres y Varsovia. También tuvo reuniones, entre otros, con representantes de consultores en recursos humanos, escuelas de negocios, el entonces director general de Industria y una visita en el hospital Clínic.

El día antes de la finalización de este curso, el juzgado notificó que estimaba otro recurso presentado por la Associació Professional de Comandaments de la Policía de Catalunya (COPCAT) y se debía paralizar todo el proceso selectivo, incluida la formación que recibía Sallent. La decisión judicial fue comunicada el mismo día 5 de julio en el Institut de Seguretat Pública de Catalunya cuando al entonces comisario jefe le quedaba una clase de inglés.

"Compromisos económicos"

En un escrito presentado ante el juzgado, los abogados de la Generalitat señalaban que el anterior director general de la Policia, Pere Ferrer, emitió un informe previo que consideraba a Sallent como la persona "más idónea" para ocupar la plaza de mayor propuesta. Por eso se le convocó a un curso de adecuación "obligatorio y selectivo" en el Institut de Seguretat Pública de Catalunya (ISPC) que se celebró entre el 21 de mayo y el 5 de julio pasado.

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"Este curso tiene un calendario prefijado y ha comportado unos compromisos económicos y profesionales que afectan a terceras personas (docentes tanto del ISPC como de organismos internacionales", remarca la Generalitat en un escrito presentado en el juzgado de Barcelona. 

Según las bases de la convocatoria, el director general de la Policía debería emitir un informe en el plazo de quince días hábiles, a contar desde la fecha de finalización del curso de adecuación, en relación con el aspirante y propondrá la resolución de la convocatoria en la persona titular de la Secretaría General del Departament de Interior. En este caso no consta el documento conforme el curso de mayor esté finalizado y por eso no se puede seguir con la tramitación, ya que supondría ir en contra de las resoluciones judiciales, han explicado varias fuentes a este medio.

Una designación contra "la neutralidad" de Mossos

En su demanda, el COPCAT consideraba que no era necesaria la plaza de mayor al tener ya una persona con esta categoría en el cuerpo, el mayor Josep Lluís Trapero actual director general de la Policía o en su defecto el propio comisario jefe ya ejercía esas funciones. Además, reclamaba la paralización de la designación de Sallent por parte de la anterior cúpula de Interior, ya que "el hecho de que se efectuase el nombramiento de plaza de mayor al amparo de unas bases como las descritas comportaría unos perjuicios irreparables o de muy difícil reparación, porque supondría revestir el nombramiento del máximo mando de Mossos d'Esquadra de una opacidad y de una connotación política contrarias a las exigencias de todo el cuerpo policial, que afectaría a la imagen de neutralidad e imparcialidad y no injerencia política que la ciudadanía debe tener su policía".

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La resolución judicial considera que la convocatoria de la plaza de mayor tiene supuestamente una "serie irregularidades que pueden dar lugar a su nulidad". En este sentido el juzgado remarca que "si se dicta una sentencia estimatoria, el proceso no se podrá retrotraer para hacer efectivo el derecho tras la sentencia, y si se hiciera, los perjuicios serían enormes, tanto para la administración como para terceros, ya que se habría nombrado al mayor de forma nula y se le habría abonado un salario que no le correspondería. A lo que hay que añadir que la plaza se encuentra actualmente cubierta y no produciría ningún vacío en el puesto".

El juicio por el proceso de nombramiento de la segunda plaza de mayor de Mossos se ha fijado entre marzo y mayo de 2025. El día que anunció que había acabado el curso Sallent remarcó que "era un servidor de la ley" y confiaba "ciegamente" en la Justicia.

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