Nueva etapa en la Generalitat

Aragonès configura la oficina de expresidente con Helena Ricomà al frente

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El ya exjefe de la Generalitat Pere Aragonès ha configurado este martes su oficina de expresidente, que tendrá al frente la que hasta ahora había dirigido su gabinete, Helena Ricomà.

Según ha publicado el Diario Oficial de la Generalitat (DOGC), el republicano se llevará también su secretaria, Sílvia Sabat, y al jefe de comunicación, Marçal Sarrats, que mantendrán los cargos que han tenido durante los últimos años.

A partir de ahora Aragonès percibirá el 80% de su sueldo de presidente, una cifra que tiene derecho a recibir al menos durante una legislatura si no tiene otro sueldo o cargo. Si el expresident percibía un salario de 136.177 euros al frente del Govern y ahora tendrá derecho a cobrar 108.941,6 euros brutos, lo que equivale a 9.078 euros mensuales.

La ley es incompatible con tener una nómina en una empresa privada, como le sucedió al socialista José Montilla cuando accedió al consejo de administración de la compañía participada por el Estado Enagás con una retribución de 175.000 euros.

El dirigente de Esquerra, asimismo, disfrutará de otros beneficios como la posibilidad de tener un despacho propio, un chófer, tres asistentes y un presupuesto de hasta 60.000 euros para gastos diversos, entre los que no se contemplan las anteriores partidas.

Después dejará de cobrarlo, pero cuando se jubile tendrá derecho a una pensión vitalicia del 60% del sueldo de presidente, tal como establece el estatuto de expresidentes. El primer president de la Generalitat catalana tras la vuelta de la autonomía Jordi Pujol renunció a su oficina de expresidente y a esta jubilación al conocerse que durante 34 años estuvo ocultando dinero en el extranjero a Hacienda.

El socialista Pasqual Maragall renunció a su pensión pública, pero recibe una aportación directa de la Generalitat de Cataluña tras detectarse que sufre Alzheimer desde 2007. En 2022, últimos datos disponibles en el Portal de Transparencia de la Generalitat, disfrutó de una asignación de 48.000 euros brutos, 36.820,80 euros netos y además Presidencia costeó 6.421,50 euros en dietas de escoltas.