LA LEGISLATURA SE TAMBALEA

Feijóo pide a los suyos estar “alerta” en agosto: “Esto revienta en cualquier momento"

El líder del PP despide a sus parlamentarios con nuevos avisos de mantener "un ojo abierto" por lo que pueda ocurrir, manteniendo la tensión en sus filas y advirtiendo a puerta cerrada de que la situación de Sánchez es cada día más insostenible

El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, durante una reunión de los grupos parlamentarios del partido en el Senado.

El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, durante una reunión de los grupos parlamentarios del partido en el Senado. / Eduardo Parra

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Todos los mensajes de la dirección nacional van en el mismo sentido. Los hubo en la Junta Directiva del lunes, con la plana mayor del partido y muchos de los presidentes autonómicos presentes, y se repitieron ayer ante todos los diputados y senadores del PP: la debilidad parlamentaria del Gobierno ha vuelto a poner en cuestión la viabilidad de la legislatura. Y aunque públicamente Alberto Núñez Feijóo descarta que Pedro Sánchez vaya a convocar elecciones, no solo las volvió a pedir - “así no podemos seguir”- sino que trasladó a sus filas que deben seguir “en alerta” por lo que pueda pasar.

Aunque el Senado aún celebrará un pleno la próxima semana, los parlamentarios del PP se despidieron este miércoles. Las vacaciones de verano ya dejaron de ser unas vacaciones comunes hace años en la política española. Pero en esta ocasión, un año después del 23J que Feijóo ganó pero no remató, la tensión sigue en el aire. El líder conservador habló de que “el colapso definitivo puede llegar en cualquier momento” y a puerta cerrada, como relatan distintos diputados, lo que trasladó es que “esto reviente en cualquier momento” y que el partido tiene que estar preparado.

En Génova no creen que Sánchez esté dispuesto a adelantar elecciones en un momento muy convulso a nivel personal, sobre todo por el caso que afecta a su mujer, investigada por presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en el sector privado. También hay otra investigación en torno a su hermano en Badajoz. La ‘trama Koldo’ sigue su curso. Pero, reconocen en el PP, hay otras variables -las políticas- que hacen impredecible cualquier escenario a corto plazo. Reconocen que hasta que la ley de amnistía no se aplique a Carles Puigdemont no ven incentivos para que Junts rompa la baraja definitivamente.

Pero con el acuerdo en Cataluña cerca para hacer presidente a Salvador Illa -aún debe cerrarse el pacto y que las bases de ERC den luz verde- tampoco está nada clara la reacción de los independentistas neoconvergentes. Que tumbaran la senda de estabilidad retrasando el camino hacia los Presupuestos Generales en el Congreso implica, como mínimo, que reclaman el protagonismo de sus siete votos. “Lanzan el mensaje de que sin ellos no hay nada. Y de que si quieren esto puede ser un infierno”, aseguran en la cúpula conservadora.

Con esos mimbres, continúan, todo puede pasar en cualquier momento. Y quizá por eso el portavoz en el Congreso, Miguel Tellado, acostumbra en todas las reuniones recientes a advertir a los diputados de que todos deben tener “un ojo abierto”. Las bromas en el grupo parlamentario son recurrentes con esa frase. Pero el diputado gallego la repite por algo. Quiere que cale el recado a los suyos. Y Feijóo retomó la advertencia en la reunión del Senado este miércoles. “No sabemos cuánto va a tardar. Si se alargará o si finalmente se precipitará, pero claramente nos quiere decir que estemos preparados porque antes o después sucederá”, reflexiona un parlamentario con trayectoria.

La sensación generalizada en los grupos de ambas Cámaras es la de que Feijóo “está crecido” y “confiado”. A pesar de que Sánchez es quien reside en la Moncloa, el expresidente de la Xunta está trasladando “seguridad” a sus filas. Muchos dirigentes, ahora que se cumple un año de las últimas generales, reconocen que Feijóo está convencido de que gobernará antes o después.

A pesar de la sobreactuación -pedir de nuevo elecciones generales forma parte de eso- en la cúpula conservadora sí creen realmente que la situación “es cada vez más insostenible” para Sánchez. Doce meses después del 23J -el socialista fue investido a mediados de noviembre- la ley de amnistía es una de las pocas normas que han visto la luz. Pero más allá de las dificultades legislativas, lo que en el PP ven es que “no tiene sentido que cada votación sea realmente un calvario”.

Feijóo repite mucho a los suyos que “gobernar no es resistir” y que ser presidente “no es estar en la Moncloa”. No solo lo dice públicamente, sino en las reuniones con sus principales dirigentes. Y la creencia es que llegará un punto en el que, dicen los conservadores, el propio Sánchez “asuma que no se puede seguir así”.

El líder del PP introdujo un matiz nuevo este miércoles cuando directamente mencionó al Rey: “Qué Sánchez llame al jefe del Estado y le diga que convoca elecciones o que se va”. La idea que repetía en todo momento es que “alguien debería decirle que así no puede seguir”.

Y, precisamente, al ser consciente de que en los próximos días podría cerrarse el acuerdo PSC-ERC para Cataluña, Feijóo reiteró que “con o sin gobierno” en esa comunidad, los españoles deberían volver a las urnas. El PP considera que un acuerdo para la Generalitat de esa naturaleza tensionará mucho más al partido de Puigdemont, que el martes ya quiso reaccionar al protagonismo que Sánchez le concedió a Pere Aragonès reuniéndose con él en Barcelona. “Pues si gobiernan juntos allí qué es lo que nos espera”, se preguntan en la cúpula conservadora, ante los acontecimientos que estén por venir.