TRIBUNALES

Magistrados del TC contrarios a anular las condenas de Chaves y Griñán: "Se tambalean los pilares del Estado de derecho"

"Ha dejado sin efecto el reproche penal de las sentencias impugnadas en amparo, trasmitiendo así a la ciudadanía que la corrupción política es un medio válido de actuación de los poderes públicos", indica Enrique Arnaldo en su voto particular

Los expresidentes andaluces Manuel Chaves (i) y José Antonio Griñán (d).

Los expresidentes andaluces Manuel Chaves (i) y José Antonio Griñán (d). / Pool - Archivo

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Los magistrados del Tribunal Constitucional Enrique Arnaldo y Ricardo Enríquez Sancho han emitido sendos votos particulares en los que rechazan de forma frontal la decisión de la mayoría, compuesta por siete magistrados, de anular las sentencias contra Manuel Chaves y José Antonio Griñán por el caso de los ERE de Andalucía.

"Me parece incuestionable que la presente sentencia, de la que respetuosa pero enérgicamente discrepo, hace tambalearse los pilares básicos del Estado de Derecho". Así de contundente se expresa el magistrado de tendencia conservadora Enrique Arnaldo en su voto particular contra las sentencias del Tribunal Constitucional (TC) en las que anulaba las condenas contra los expresidentes andaluces.

"Ha dejado sin efecto el reproche penal de las sentencias impugnadas en amparo, trasmitiendo así a la ciudadanía que la corrupción política es un medio válido de actuación de los poderes públicos, mientras lo hagan bajo la pretendida cobertura formal de un artificio legal ideado precisamente por aquellos que pretendían eludir el control del gasto público", destaca este magistrado del TC.

Arnaldo es uno de los cuatro magistrados que se opusieron a la decisión de la mayoría del Constitucional, compuesta por siete magistrados, que ha decidido requerir a la Audiencia Provincial de Sevilla para que reduzca las penas de inhabilitación, en el caso de Chaves, y de cárcel e inhabilitación en el de Griñán.

"Una nueva instancia"

Con esta sentencia, prosigue Arnaldo, el Tribunal Constitucional se "autoasigna" una función propia de los tribunales de justicia ordinarios, "convirtiéndose en una nueva instancia revisora que realiza el juicio de subsunción penal y revalora a su libre arbitrio las pruebas practicadas en el juicio oral".

Además, "socava la posición institucional que la Constitución atribuye al Tribunal Supremo como órgano jurisdiccional superior en todos los órdenes", pues se inmiscuye "en funciones que son propias de aquel [...] olvidando que la jurisdicción constitucional debe evitar caer por desfiladeros abruptos".

Y finalmente, "suprime de un plumazo la idea de control del gasto público", continúa Arnaldo, que concluye que de esta forma las sentencias de Chaves y Griñán dejan al Estado sin "el instrumento más eficaz en la lucha contra el fraude y la corrupción política institucionalizada".

Arnaldo finaliza su voto particular reprochando "el apresuramiento con que este Tribunal ha despachado el asunto que nos ocupa", que, al igual que en el resto de las votaciones sobre los ERE, "ha sido deliberado y votado por el pleno en muy poco tiempo, lo que tal vez ha contribuido al resultado de una sentencia desafortunada (por decir lo menos) en la forma y en el fondo", dice este magistrado, que lamenta que "ninguno de los argumentos" que ha defendido en sus votos particulares "ha sido rebatido o contestado; ni siquiera una coma de las iniciales sentencias de esta serie ha sido cambiada de sitio" concluye.

Enríquez Sancho

Por su parte, Ricardo Enríquez Sancho rechaza que los dirigentes socialistas andaluces no puedan ser condenados, como establece el TC, por aprobar modificaciones legales al tener el amparo del Parlamento autonómico, y asegura que "una cosa es que la jurisdicción contencioso -administrativa venga declarando que esa actividad no constituye un acto impugnable y otra que no pueda ser objeto de control por ningún órgano judicial”.

Para este magistrado, "no es en el ámbito de la inconstitucionalidad de leyes de presupuestos donde se mueven las sentencias impugnadas, sino en el de la creación de un marco jurídico aparentemente neutro a cuyo amparo pudiera actuarse disponiendo de ingentes cantidades de dinero sin control efectivo alguno".

Los otros dos magistrados de tendencia conservadora, César Tolosa y Concepción Espejel, también anunciaron votos particulares contra la decisión de la mayoría de amparar a Chaves y Griñán. Estos documentos todavía no han sido presentados.