Cisma en Consell de la República: ¿de qué acusan a Toni Comín y por qué lo tacha de "venganza"?

A pesar de que la guerra interna de ERC hace más ruido, los republicanos no son los únicos que atraviesan una crisis. El Consell de la República tampoco vive un buen momento y, de paso, también salpica a Junts. El origen de la polémica son las acusaciones de irregularidades y mala gestión por parte del vicepresidente de la entidad y eurodiputado electo de los posconvergentes, Toni Comín. La cúpula de la entidad intentó sofocar el conflicto, que saltó a la arena pública la semana pasada, con el anuncio de una auditoria externa, a pesar de ratificar a Comín en cargo. Sin embargo, la publicación por parte del diario 'El Món' de más detalles sobre la cuestión ha reavivado la pugna.

Concretamente, se explica que Sergi Miquel, el exgerente de CatGlobal -la empresa que actúa como paraguas legal del Consell en Bélgica- habría rechazado pagar varias facturas a nombre de Comín por valor de hasta 4.786 euros. Entre estos gastos habría billetes de avión, el alquiler de un vehículo y un alojamiento en la población francesa de Paçà durante 17 noches, del 31 de marzo al 17 de abril de 2023, coincidiendo con las vacaciones de Semana Santa. Miquel dejó por escrito a través de un correo electrónico su oposición a tramitar dichas facturas por considerarlos gastos de carácter personal desvinculados de la entidad.

El Consell de la República hará una auditoría de sus cuentas tras las acusaciones a Toni Comín

Comín lo atribuye a una venganza

En cambio, Comín alega que se trata de gastos derivados del ejercicio de sus funciones como representante del Consell de la República y asegura que la organización siempre ha pagado las facturas de los viajes de sus miembros a Bélgica, igual que los suyos al sur de Francia. Según él, estos viajes, que realiza siempre que su hija tiene vacaciones escolares, le sirven para realizar reuniones vinculadas al Consell y para ahorrar desplazamientos de otros miembros de la entidad a Bélgica.

Además, acusa a Miquel de actuar con "ánimo de venganza", tras haber sido apartado de su cargo por "mala gestión", al considerar que era una fuente de tensiones permanentes y que no cumplía con el trabajo que tenía encomendado. Según fuentes del Consell, el correo electrónico de Miquel rechazando las facturas fue enviado tras habérsele notificado su relevo y a pesar de que en ocasiones anteriores había autorizado el pago del mismo tipo de gastos.

El Consell de la República abre una nueva etapa tras cinco años bajo la batuta de Puigdemont

Antecedentes polémicos

Esta no es, sin embargo, la primera polémica que atraviesa la entidad con Comín en el punto de mira. Hace casi un año, una treintena de integrantes de la Assemblea de Representants -que funciona como una especie de pseudoparlamento de la entidad- se quejaron de la decisión de la cúpula -lo que sería el 'gobierno'- de limitar sus funciones. En aquel momento, este grupo ya apuntó directamente al vicepresidente, acusándole de dirigismo y de beneficiar económicamente a su círculo con la gestión y realización de los eventos.

Junts, por su parte, mira de pasar de puntillas por todo este asunto y trata de separar el partido de la entidad, a pesar de que el presidente de dicho organismo sea su candidato a la Generalitat, Carles Puigdemont, y de que su vicepresidente es el propio Comín, el único eurodiputado que el partido obtuvo en las pasadas elecciones europeas. El partido no tiene intención de pronunciarse al respecto y considera que es un asunto que se debe dirimir internamente en el Consell.

Suscríbete para seguir leyendo