Presidente ANC

Llach duda de la financiación singular: "España necesita los 22.000 millones para ser como es. No cambiará"

Lluís Llach pide evitar un Govern de Illa y culpa a ERC de la caída del independentismo

Lluís Llach, nuevo presidente de la ANC

¿Qué pasa en la ANC? Las claves de la disputa

Lluís Llach, en ‘Café d’idees’ (TVE).

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ACN

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El nuevo presidente de la ANC, Lluís Llach, ha expresado sus dudas con la propuesta de financiación singular del Govern este domingo. "España necesita los 22.000 millones para ser como es. ¿La ven dispuesta a cambiar? No creo. Es un fracaso. ¿Qué significa singular?", ha cuestionado Llach en una entrevista en el 'Nación Digital'. "Siempre piensan en el posibilismo, pero cuando eres una colonia estos posibilismos no los puedes tener. La metrópoli quiere nuestros 22.000 millones y otras cosas, ¿creen que tiene algún interés en arreglarlo? No", ha continuado el presidente del ANC, quien también ha apostado por "dinamizar" una Asamblea "que está algo mortecina en algunos aspectos". "El proceso no ha terminado, sólo está decaído", ha querido dejar claro el cantoautor.

"Debemos intentar adaptar el trabajo de la entidad, sin olvidar que el objetivo es la independencia. Quien finalmente decidirá el camino es la comisión de estrategia, que define la hoja de ruta, que si todo va bien aprobaremos en la octubre", ha precisado el presidente del ANC. "Debemos colaborar con la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) para cuestiones municipales, con Òmnium por su trascendencia, con e Consell de la República si define su función en el exterior, con los CDR... Son puentes que estaban un poco estropeados", ha enumerado Llach, quien ha reconocido que "la división en el mundo político se ha trasladado a las entidades". "Todo, sumado a la represión, ha dibujado un panorama bastante desastroso", ha apuntado Llach.

Crítico con los partidos políticos

Llach ha continuado siendo muy crítico con los partidos políticos y ha sentenciado que "arreglar el país con el autonomismo no funciona". "Estamos discutiendo en un posibilismo fantasioso mientras hay un golpe de estado judicial, un expolio descomunal, los trenes no funcionan, los agricultores están enfadados... Si quieren ganar, los partidos tendrán que pensar en cómo hacerlo. Nuestro trabajo no es pelearnos, sino convencerles de que están equivocados", ha puesto sobre la mesa Llach, quien ha apostado por que las fuerzas independentistas mantengan la Generalitat, aunque sea con la abstención del PSC. "Quiero que las fuerzas independentistas intenten mantener el poder en las instituciones y que lo utilicen para, paso a paso, ir avanzando hacia la independencia. Cueste lo que cueste", ha insistido el presidente de la ANC.

En paralelo, y en una entrevista en el diario 'Ara', Llach ha valorado con reticencias y sin aspavientos la ley de amnistía. "Lo único que quiero es que esta amnistía sea para el último CDR que hay en este país. Si no, me enfadaré mucho porque volverá a ser un pacto entre políticos", espetó el presidente de la ANC, que ha insistido en su crítica en la estrategia de ERC y Junqueras, a quienes ha acusado del bajón del independentismo. "¿No se ve? Lo criticaba porque preveía esto. Junqueras ha definido una estrategia que era una autopista para el PSC", ha recalcado Llach. "De entrada, si él decidió cambiar 180 grados la estrategia debería haber dimitido, debería haber explicado el nuevo plan y ver si lo aceptaban", apuntó el presidente de la ANC.

Por último, Llach ha querido revelar uno de las interioridades de la concentración del 20-S en el Departamento de Economía. "Se ha criticado a Jordi Cuixart y Jordi Sànchez por enviar a la gente a casa el 20-S. Lo hicieron porque si no Trapero daba órdenes de hacer entrar a Brimo. Y hacer entrar a los Mossos diez días antes del 1 -O lo ponía en peligro todo. Yo estaba allí con Sánchez pidiendo al mando de Brimo que no entraran", ha destapado el presidente de la ANC.