Reclutamiento terrorista

Golpe a la red de Estado Islámico que captó a los nueve yihadistas detenidos esta semana

El musulmán integrista detenido en Salt protagonizó un tráfico accidente en Susqueda

Diversos momentos de las detenciones practicadas por la Guardia Civil en la Operación Almuasasa contra el terrorismo yihadista

Juan José Fernández
Germán González
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Esta vez no han caido únicamente repicadores de mensajes yihadistas en las redes sociales. Los nueve detenidos el pasado martes en Salt (Girona), Algeciras (Cádiz) y Antas (Almería) integraban un escalón último, los consumidores de lo que en la lucha antiterrorista internacional se clasifica como TOWs, Terrorist Operational Websites. La Guardia Civil y el FBI norteamericano, en la operación Almuasasa, han desmantelado uno de los mayores entramados informáticos y mediáticos asociados al Estado Islámico (o Daesh), una red que tenía clandestinos tentáculos en España, activos especialmente en Catalunya y, además de Andalucía, las islas Canarias.

Cuando, en enero pasado, agentes del instituto armado detuvieron en el aeropuerto barcelonés de El Prat a un magrebí radicalizado, no solo frustraron el viaje que estaba a punto de hacer a la zona de guerra yihadista del Sahel; también estaban neutralizando a un recluta de este sistema de leva online de terroristas.

El detenido, actualmente en prisión, había partido de Lleida, donde, antes de decidir entregarse a la yihad, había estado consumiendo contenidos violentos y argumentarios de odio a Occidente y a los musulmanes no radicales proporcionados, en origen, por una entidad clave: I’Lam.

El viajero de El Prat es uno de los soldados instruidos por red. Se encontraba ya en la fase de lo que en el Servicio de Información de la Guardia Civil llaman “radicalización profunda”, el mismo estado en el que estaban los detenidos este martes, en camino de buscar el mismo destino.

Servidores en cuatro países

Cualquier proceso de radicalización en suelo europeo cobra importancia prioritaria en estos momentos para las fuerzas de seguridad, estando tan próximos ya los Juegos Olímpicos de París. Los Juegos estaban siendo crecientemente mencionados en llamamientos a actuar, abriéndose paso como narrativa entre centenares de vídeos promocionales de atrocidades cometidas por los terroristas en África, su actual escenario.

Conseguir esa “radicalización profunda” en los acólitos es objetivo de creadores de contenidos, difusores, organizadores de servidores y de su blindaje… y del centro original, la Fundación I’Lam, raíz de toda una venosa capilaridad del odio islamista radical.

I'Lam tiene el mismo nombre que otra fundación, integrada por intelectuales y periodistas palestinos y con sede en Nazaret. Pero no se trata de esta: según los resultados de la investigación, de la I´Lam terrorista, sin sede física cierta, mera existencia virtual, salen otras ramas, canales de internet para la difusión de la propaganda y las órdenes genéricas de atacar en las calles de Occidente, un sistema que viene creciendo para la distribución de su tóxico fluido desde 2015 y que ya operaba en 30 idiomas.

A los guardias se les encendieron las alarmas cuando hallaron contenido traducido al español. "Eso significa que no solo buscan hablantes en árabe -explica a EL PERIÓDICO uno de los oficiales que han intervenido en la investigación-; también buscan migrantes de segunda o tercera generación, que ya manejan el castellano mejor que el árabe, y, claro, el mundo latinoamericano", un área en la que el yihadismo está dejando ver sus primeros brotes.

Entre esas 30 lenguas que usan las plataformas no está el catalán. "Encara no, ja arribarà el moment', contesta, con acento de Barcelona, el mando del instituto armado.

Sobre si la relación de I’Lam con el Estado Islámico es transversal o vertical puede que salga respuesta definitiva de los terabytes de información que se han aprehendido en este golpe policial. Han sido clausurados decenas de servidores en Alemania, Países Bajos, Estados Unidos e Islandia, según ha difundido este viernes la Guardia Civil. Han contribuido además pesquisas de especialistas policiales de Francia, Estonia y Rumanía.

Locura

El capitán Alberto Rodríguez, jefe de esta operación del instituto armado, ha contado en una comparecencia ante los medios convocada por Europol que no hay un perfil único de los consumidores de estos mensajes, pero sí una casuística muy frecuente: el trastorno mental. Seis de los nueve detenidos en España, incluido el albañil de Salt, mostraban rasgos de gran debilidad ante la seducción del Daesh.

"Los organizadores de estas plataformas se benefician de la existenca de gente con vulnerabilidades: el proceso por el que pueden caer es mucho más veloz", explica la mencionada fuente del operativo.

A través de las webs a las que llevaba I’Lam, los nueve detenidos en España podían acceder a manuales de fabricación de explosivos, prontuarios para atacar en eventos y todo tipo de jaculatorias justificativas de la violencia. El conjunto de webs forman un gran reservorio de contenidos. "Es un yIhanetflix", compara, para hacerlo más inteligible, el oficial de la Guardia Civil. Al usuario que accede a la propaganda con su móvil "no se le envía un vídeo de 30 megas, sino que se le da un hipervínculo en el que clikar para verlo".

Entre el contenido radicalizador se ha hallado incluso material para niños, toda una librería, con cuadernos didácticos, pinta-y-colorea... "juegos en los que con el pollito también meten el kalashnikov, o la bandera de Daesh."

Fue la detección de uno de estos contenidos traducido al español lo que dio inicio a las pesquisas de la Guardia Civil, en 2022. Tras este golpe policial, ahora una buena parte de las direcciones de internet a las que I’Lam ofrecía conexión aparecen bloqueadas o dicen estar “en reparación”.

La web de Al Raud, neutralizada por la Guardia Civil y el FBI, muestra este mensaje.

La web de Al Raud, neutralizada por la Guardia Civil y el FBI, muestra este mensaje. / El Periódico

La red no solo se dedicaba a la difusión de postulados violentos. Muchas de las webs soportadas por la trama llevan en alguno de sus rincones un Support Us (Apóyanos) y cuestaciones en árabe, o ventanas de donación a las que se podía acceder leyendo un código Bidi. El entramado se financiaba, según ha contado Rodríguez, por acciones de micromecenazgo. Se investiga la circulación de fondos en criptomoneda entre sus actores.

Galaxia mediática

I’Lam es un espacio clave en la galaxia de la fanatización de musulmanes proclives a dejarse enrolar. De I’Lam parten las ramas de las webs yihadistas operativas Fahras, Al Raud y Alfajr, y de cada una de estas cabeceras, toda una extensa capilaridad para la distribución de las consignas, la ideología y los llamamientos a matar de Daesh, que circula tanto por la internet superficial como por la llamada internet oscura.

Todo el árbol se agrupa en una estructura, de nombre Shar Al Khilafa. Esa red no es propiamente un órgano oficial del Daesh, sino creación de sus simpatizantes, pero sí es, según considera la Guardia Civil, la principal vía actual de acceso a los postulados oficiales de esa multinacional terrorista. La más próxima es Fahras, que funciona como agregador de enlaces.

A través de estas TOWs, acceden los radicales a los productos de propaganda del Estado Islámico, desde la agencia de noticias Amaq hasta las incendiarias homilías que difunde la emisora de radio Al-Bayan, los violentos vídeos de Al Hayat Media Center o las publicaciones online o en pdf de las revistas Dar al Islam, Konstantiniyye o Dabiq, entre otros muchos productos mediáticos de Daesh.