La CUP se reunirá con Puigdemont, ERC y Comuns para tratar de impedir que el PSC presida el Parlament

Aunque el varapalo electoral les haya dejado con tan solo cuatro diputados, la CUP no renuncia a poder influir en las negociaciones en el Parlament. Tanto es así que los anticapitalistas se reunirán este jueves con el candidato de Junts, Carles Puigdemont, pero también en los próximos días con ERC y con los Comuns, con el objetivo de tratar de amarrar un acuerdo para que la presidencia de la institución esté en manos de los independentistas. Se trata de tejer una mayoría para tratar de impedir que sea el PSC quien se quede con la batuta de la Mesa.

PSC y ERC se dan tiempo y desvinculan el pacto por la Mesa del Parlament del de la investidura

Así lo ha explicado la diputada de la CUP Laia Estrada, que en una entrevista en Catalunya Ràdio ha detallado que están "explorando la posibilidad" de conseguir una composición de la Mesa con carácter "antirrepresivo" para que se "garanticen los derechos de los diputados y la poca soberanía que queda en el Parlament". A su juicio, eso no estará asegurado si hay una presidencia socialista, escenario probable si los partidos independentistas no consiguen llegar a un acuerdo. La CUP no ha descartado que la solución pase por apoyar una presidencia de ERC.

La apuesta de los Comuns

Sin embargo, los tres partidos independentistas suman 59 votos, lejos de la mayoría absoluta y menos de lo que sumarían PSC, PP y Comuns (63) si se ponen de acuerdo para apoyar a un dirigente del grupo de Salvador Illa. Por ahora, el partido de Jéssica Albiach ha defendido una suma con ERC y el PSC tanto para el Parlament como para formar Govern. El candidato a las elecciones europeas, Jaume Asens, ha defendido que no negociarán nada con el PP, pero que lo que no pueden evitar es que lleguen a "coincidir" en alguna votación.

La CUP ve con recelos que se acabe configurando un tripartito para gobernar Catalunya, cosa que, a su juicio, supondría que ERC se "desdijera" de cuestiones que ha puesto hasta ahora encima de la mesa, como el derecho a la autodeterminación. Además, acusan al partido de Illa de representar al PSC "más a la derecha y españolista de la historia". Estrada también deja fuera de la ecuación de los pactos a Aliança Catalana, que consideran que son "enemigos de la causa independentista" porque provocan división.