Aragonès ve posible mantener la Fórmula 1 en Catalunya pese a la irrupción de Madrid

Que Madrid tenga a partir del 2026 su propio Gran Premio de Fórmula 1 no preocupa al Govern. Como mínimo esa es la sensación que ha intentado transmitir este martes Pere Aragonès. El president de la Generalitat ha asegurado que ve posible que Catalunya mantenga su Gran Premio a partir del 2026, que es cuando expira el contrato actual con el Circuït de Montmeló. En definitiva, que el objetivo es que convivan las dos citas en el calendario. "Seguimos trabajando para extender más allá del 2026 un campeonato que lleva más de treinta años desarrollándose en Catalunya", ha dicho en declaraciones a los medios de comunicación.

Así, la idea de la Generalitat es que la irrupción de Madrid en la competición no deje a Catalunya sin su cita anual con la Fórmula 1 que vienen celebrándose de forma ininterrumpida en Montmeló desde 1991. Este ha sido el mensaje que ha enviado el Govern: intentar polemizar lo mínimo con Madrid y defender que es posible que una cita automovilística no suponga la eliminación de la otra.

De hecho, la tesis del Govern no es distinta a la de los organizadores de los grandes premios. Este mismo martes el president y consejero delegado de la Fórmula 1, Stefano Domenicali, ha asegurado que ambas pruebas pueden convivir. "Para evitar dudas y aclararlo, el hecho de que estemos en Madrid no excluye que podamos quedarnos en Barcelona en el futuro", ha afirmado. "De cara al futuro, hay conversaciones en marcha para ver si realmente podemos ampliar nuestra colaboración con Barcelona, con quien tenemos una muy buena relación", ha abundado.

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El objetivo del president Aragonès también es evitar el cuerpo a cuerpo con Madrid. Es decir, está convencido que no sacará ningún rédito de enfrentarse por este tema a la presidenta Isabel Díaz Ayuso. Así, este lunes el president ya decía que le parecía "provinciano" haberse de comparar todo el día con Madrid. Este martes ha añadido que "en Catalunya trabajamos para Catalunya" y que sus preocupaciones no atañen las cuestiones de otras comunidades autónomas.