Acuerdo para la distribución del Congreso: Vox queda diluido y Junts y EH Bildu ganan posiciones

La música dejó de sonar y se acabó el juego de las sillas. Desde este martes, cada diputado ya tiene su escaño asignado. La Mesa del Congreso ha aprobado la distribución de los grupos parlamentarios en el hemiciclo. Una disposición bastante similar a la de la anterior legislatura, aunque con algunos cambios. Vox estará más disperso por toda la Cámara, con un PP más numeroso rodeándole. Además, tanto Junts como EH Bildu adelantan posiciones y pasan de estar en el gallinero a ocupar asientos en la cuarta fila, un gesto reseñable dada la importancia que tendrán en esta legislatura.

El reparto, que ha sido aprobado con el 'sí' del PSOE y Sumar y la abstención del PP, permitirá que tanto los socialistas como sus socios puedan ofrecer una imagen compacta. El PSOE ocupará prácticamente entera la bancada de la izquierda -salvo los tres escaños del grupo Mixto y los siete de Junts- y los de Yolanda Díaz, con 31 diputados, tendrán cuatro asientos de primera fila en la bancada central. El PP no gozará de estos mismos privilegios. Los populares deberán compartir los 10 asientos de la primera fila con Vox -siete para los conservadores y tres para los ultras-.

El PNV, pese a que solo tiene cinco diputados, seguirá manteniendo su lugar privilegiado en la primera fila de la bancada central, donde tendrá tres asientos. Y ERC también conservará su situación actual, con sus escaños repartidos entre la tercera y cuarta hilera. Así, tanto los republicanos catalanes como los jeltzales seguirán compartiendo escaleras con Vox. Además, la distribución del partido de Santiago Abascal, disperso por gran parte del 'gallinero', llevará a que sus diputados sean vecinos de escaño de parlamentarios de EH Bildu o Sumar.

Disputa resuelta

El baile de sillas provocó la semana pasada primera bronca de la legislatura. El PP puso el grito en el cielo ante la primera propuesta que presentaron el PSOE y Sumar. "Nos sacan de lo que nos corresponde", denunciaron fuentes populares, sin querer dar más explicaciones, aunque dejando entrever que en el esquema planteado por los socialistas no ocuparían la totalidad de la bancada de la derecha, donde se ha sentado tradicionalmente el partido hegemónico del espacio conservador. Finalmente, han acabado aceptado esa distribución.

Fuentes cercanas a la presidencia de la Cámara explican que la intención con esta disposición de los grupos es ofrecer una "buena visibilidad de la pluralidad" del Congreso siguiendo "criterios históricos". También se ha llegado a un acuerdo para el reparto de despachos. Los cuatro grupos principales -PP, PSOE, Vox y Sumar- tendrán entre 19 y 20 metros cuadrados por diputado, que incluirán salas de reuniones, despachos y personal de apoyo. Los grupos más pequeños dispondrán de más espacio por parlamentario.