ELECCIONES GENERALES 23J

Feijóo insiste en el voto socialista con el exministro César Antonio Molina y guiños al sector cultural

Quien fuera durante dos años miembro del Gobierno de Zapatero pide el voto para el PP y se postula, según corroboran fuentes del partido, para ser ministro de Cultura

Feijóo: “No se pueden borrar cinco años de ‘mentiras, maldades y manipulaciones’ en cinco días de platós”.

Agencia Atlas | Foto: José Luis Roca

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El

PP

persiste en su obsesión por el voto central del cuerpo electoral y por captar votantes del

PSOE

. Siempre ha sido uno de los principales objetivos de 

Alberto Núñez Feijóo

, que ha consolidado su trayectoria politica sobre el perfil de un líder moderado. Un rasgo que ahora, con los pactos suscritos con

Vox

, el último este mismo viernes en Extremadura, se puede ver amenazado.

En medio de esta tensión, con la ultraderecha imponiendo conceptos negacionistas como la violencia intrafamiliar en los acuerdos y el PP tratando de contrarrestarlo incluyendo también la mención a la violencia machista -menos en Valencia-, Feijóo ha hecho

un guiño al sector cultural

, tradicionalmente más cercano a los partidos progresitas. Con ellos ha compartido un acto en Madrid, que ha tenido al exministro socialista de Cultura en la etapa de José Luis Rodríguez ZapateroCésar Antonio Molina, como uno de los principales protagonistas.

En su intervención Molina ha reclamado el voto para al candidato popular y le ha pedido que mantenga el Ministerio de Cultura. Feijóo ha confirmado después que evidentemente que lo hará. En las palabras de quien fuera también director del Instituto Cervantes, el auditorio ha entendido que se postula para el cargo. Fuentes del PP lo corroboran: "Ha sido mucho más que eso".

"El ministro de Cultura debe ser un ministro de paz, que está por encima de las ideologías porque representa al Estado", ha dicho, después de calificar a Feijóo como un político "sensato, capaz, fiable" en una España de "insensatos", una categoría en la que incluye al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que "piensa que solo los vascos y los catalanes son de primera y el resto de segunda o de tercera".