La legislatura catalana

Los 'comuns' vinculan su apoyo al Govern a que ERC vote la reforma laboral

ERC acusa a los de Albiach de "amenazar y chantajear" como en la "vieja política"

Albiach anuncia a Aragonès y Junqueras que les dejarán de apoyar en el Parlament si no votan el decreto

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz / Ricardo Rubio/Europa Press

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En un intento de última hora por conseguir el apoyo de ERC a la reforma laboral, que se vota el jueves en el Congreso, los 'comuns' han presionado a los republicanos vinculando su apoyo al Govern con la aprobación del decreto que impulsa la vicepresidenta Yolanda Díaz. Por ahora, el Gobierno da por perdida a ERC y asume lo más probable es que tenga que sacar adelante la reforma laboral con los votos de Ciudadanos.

"El calculo electoral de ERC tendrá consecuencias", advierten fuentes de los 'comuns'. Hasta el punto de que la líder de En Comú Podem, Jéssica Albiach, ha anunciado a la cúpula de los republicanos -entre otros, al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y al presidente del partido, Oriol Junqueras- que si no apoyan la reforma laboral en adelante no podrán contar con su apoyo en el Parlament, como adelantó 'La Vanguardia'.

Los votos de los 'comuns' fueron claves para que el Govern sacara adelante los presupuestos de la Generalitat. Pero, aunque esa fue la votación más emblemática, en los últimos meses En Comú Podem ha desplazado a la CUP como socio preferente, y ha apoyado más decretos y proyectos de ley que los anticapitalistas, que fueron socios de investidura de Aragonès.

La reacción de ERC

Los republicanos, con mil frentes abiertos, como el plantón de la CUP a Aragonès, el propio debate de la reforma laboral y, de fondo, el poco caso que el PSOE hace a la mesa de negociación, acogieron sin estridencias el órdago posecosocialista, informa Xabi Barrena. "Es curioso que una fuerza que nació a la luz del 15-M para acabar con la 'vieja política' haga uso y abuso de ella, como hemos visto en el trámite de la reforma laboral. Primero, pactan en un despacho con la patronal y vetan que, allí donde reside la soberanía popular, el Congreso, se pueda abrir un debate sobre el texto. Y ahora, en el Parlament, se acogen a amenazas y chantajes, es decir, la vieja política de siempre", sentenció una voz republicana a este diario.