Polémica por la acción de los Mossos

Aragonès cierra filas con Sàmper y pide apartar el debate policial de la arena política

El 'president' sustituto en funciones llama a "profundizar y poner al día" el modelo policial en el Parlament

Muestra su apoyo a los Mossos d'Esquadra y a la libertad de expresión y pide un análisis "sereno y distante"

Pere Aragonès

Pere Aragonès / FERRAN NADEU

Xabi Barrena

Xabi Barrena

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En época de negociaciones para formar un Govern, Pere Aragonès orilló este lunes cualquier tentación de dejar caer sobre los hombros de Miquel Sàmper (JxCat) toda la responsabilidad por la gestión política de los operatios policiales de esta última semana por el 'caso Hasél'. El ‘president’ sustituto en funciones llamó “a profundizar y poner al día” el “modelo de policía democrática” que opera en Catalunya. Y hacerlo por los cauces parlamentarios para lograr el mayor acuerdo posible. Tras mostrar su apoyo a los 17.000 trabajadores públicos que velan por la seguridad y el espacio público, en referencia a los agentes del Cos de Mossos d’Esquadra (CME) y, también, su compromiso con la libertad de expresión, Aragonès eludió toda polémica con el ‘conseller’ de Interior ya que señaló que estos días ha habido "una comunicación constante entre Sàmper, los mandos de los Mossos d'Esquadra" y él mismo, y que la crisis se afronta "de forma conjunta y con responsabilidad compartida". 

Aragonès recorrió, por tanto, la senda parlamentaria abierta por la mañana tanto por ERC, vía Marta Vilalta, como por Junts, con Elsa Artadi. La vicepresidenta de la fuerza puigdemontistas también mostró su apoyo al CME, pero propuso, asimismo, la creación de una comisión de estudio en el Parlament sobre el modelo de orden público. "La mejor manera de preservar el cuerpo y de defender a los agentes es identificar las actuaciones que no sean correctas y revisar los protocolos que sean necesarios", dijo Artadi.

Análisis de los orígenes

Curiosamente, un discurso parecido al expresado por el vicepresidente del Govern que reclamó “investigar si ha habido mala praxis por parte de algunos agentes”. Pero también, enraizando con la tercera pata de su programa de campaña (los otros dos son la autodeterminación y la amnistía) pidió “analizar el origen último de este malestar” que, en su opinión se halla en la “precariedad y las desigualdades”.

Asimismo, el presidenciable republicano llamó a evitar que el debate sobre la seguridad y el papel de los Mossos se convierta en “un pim, pam, pum” político por lo que reclamó abordar la cuestión “desde la serenidad y la distancia, nunca en caliente”.  Buscando siempre el equilibrió, abogó por "no criminalizar las protestas" y, al tiempo, señaló que "la quema de mobiliario público y el pillaje no son muestras de la libertad de expresión"

El republicano también señaló que "siempre he estado a disposición del Parlament" en referencia a la petición de comparecencia que el PSC le ha hecho para que dé detalles de lo sucedido en la última semana en la diputación permanente de la Cámara catalana, a la espera ya de constituir el nuevo hemiciclo salido de las urnas del pasado 14-F.

Y es que, horas antes, la viceprimera secretaria del PSC, Eva Granados, había anunciado que su partido solicitará la comparecencia de Aragonès para que explique su "incomparecencia" ante los disturbios de los últimos días en Catalunya. "Todo el mundo se pregunta dónde está Aragonès estos días. Llevamos muchas noches en las que nuestras calles están incendiadas y en que se están vandalizando tiendas y lo que clama al cielo es la incomparecencia de Aragonès", criticó . 

El todavía principal grupo de la oposición, Ciudadanos, fue aun más lejos y presentó ante Fiscalía una querella por prevaricación contra Sàmper por "no proteger" a los Mossos d'Esquadra ante los altercados.