Junqueras refuerza el flanco izquierdo de Esquerra

Oriol Junqueras en la comisión de Economía

Oriol Junqueras en la comisión de Economía / periodico

XABI BARRENA / BARCELONA

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Oriol Junqueras sigue persiguiendo la creación de la llamada ‘CiU de izquierdas”, con el que dominar el amplio espectro que definen, por un lado, los límites de la propia CDC y, por el otro, los de la CUP. Así, mientras en el Parlament y en el Govern se sientan del brazo de Convergencia, y el propio Junqueras trata de hacer ‘digerible’, mediante varias reuniones ya mantenidas, el proyecto republicano a lo que se conoce como poderes económicos, el papel de ERC en el Congreso es afilar, justamente, el flanco izquierdo. Mantenerlo presente porque, en las próximas elecciones al Parlament, dentro de 18 o más meses, la partida del soberanismo se jugará, en buena parte, en el campo ideológico de la izquierda.

Así, de cara a las elecciones del 20-D, Junqueras dibujó una ‘alineación’ de diputados muy volcada a la izquierda. Desde el más ‘rojo’ de los diputados propios, Joan Tardà, a los fichajes externos como Gabriel Rufián Ana Surra. Todos ellos, junto Eduardo Reyes (expresidente de Súmate) participarán con el propio líder en un acto de celebración del Primero de Mayo en el área metropolitana, en el parque de la Torre del Lluc de Gavà, el próximo 30 de abril.

OPOSICIÓN A LA LISTA UNITARIA

Obvio es que, si la semana próxima, en la previa del acto, se confirma que se va a elecciones el 26 de junio, la convocatòria asumirá  también el rol de lanzamiento de la campaña electoral de los republicanos. ERC no prevé realizar grandes cambios con respecto a su 'alineación' del 20 de diciembre, Y aún otra derivada, los republicanos deben de considerar que cuanto mayor sea la apuesta y el sesgo progresista de sus actos, políticas y arengas, más se aleja, de paso, del fantasma de la lista única que los convergentes anhelan reeditar.

La oposición republicana a una especie de 'Junts pel Sí bis' 'Junts pel Sí bises férrea. Sobre todo porque, tal y como defendieron en noviembre pasado tanto ERC como por aquel entonces CDC, darle a los comicios generales el toque plebiscitario es abrir la puerta a que, aun venciendo en escaños por la mínima a En Comú Podem (vencedor hace tres meses), se hagan lecturas porcentuales sobre el total de votantes. Es decir, que haya quien se agarre a que el independentismo yendo de la mano, apenas suma un 31% de los votos (como pasó el 20-D) . En diciembre, ERC venció el derbi particular con CDC

Y huelga decir que, en lo estratégico, ir de la mano de los convergentes supone perder comba en la lucha con el ‘colauismo’ por acercarse a ese electorado que puede definirse, sobre todo, de izquierdas y metropolitano.