El PSC escenifica su ruptura en Girona

Baile de sillas e intercambio de reproches en las filas socialistas de Girona. El PSC escenificó anoche la escisión del partido en el primer pleno municipal después de que seis de los siete concejales que obtuvieron en los últimos comicios se hayan dado de baja del partido y hayan decidido pasar al grupo de regidores no adscritos. Los últimos cinco lo hicieron ayer mismo.

En una sesión que comenzó con la justificación de los últimos regidores que han roto el carnet socialista, la anterior portavoz del PSC y actual militante de Moviment d’Esquerres (Mes), Pia Bosch, afirmó que su decisión responde al “deterioro” que ha sufrido el partido después de que el proceso soberanista llevara a la dirección a tomar un rumbo que “ha quebrado la pluralidad hasta conducir a la ruptura”.

Honestidad e independentismo

Sílvia Paneque, futura alcaldable del PSC en Girona y la única concejala con que cuenta ahora el grupo municipal, acusó a sus excompañeros de falta de “honestidad” al haber aprovechado su puesto en el grupo municipal socialista para impulsar la formación de otro partido.

"Es cierto que la cuestión ideólogica ha afectado, pero también hay otras que explican mejor las circunstancias en Girona. He de decir que me ha decepcionado profundamente observar que ciertos cargos notables o intermedios del autonomismo hoy quieran convertirse en líderes pretendidamente renovados del independentismo”, censuró Paneque en referencia a 'exconsellers' como Ernest Maragall, Marina Geli, Montserrat Tura, o Antoni Castells, y a otros dirigentes como Joaquim Nadal, Manel Nadal y Manel del Pozo, que han dado su apoyo a los regidores que han abandonado el PSC.