Carulla presidirá los 4 próximos años el Orfeó

Mariona Carulla será la nueva presidenta del Orfeó Català, según el escrutinio acabado cerca de las dos de la madrugada pasada. La candidatura de Carulla obtuvo 579 votos frente a los 260 del otro candidato, Enric Enrech. Hubo 61 votos no válidos, dos nulos y 18 en blanco. El millar de socios que votaron a partir de las siete de la tarde para decidir quién regirá la entidad hasta el 2014 debían elegir entre la opción continuadora de quien sustituyó a Fèlix Millet en julio del 2009 y la alternativa de Enrech, presidente del Col.legi d'Agents Comercials y excantaire del Orfeó.

A la sala del Petit Palau acudieron, a partir de las siete de la tarde,  unos 400 socios para ejercer el derecho de voto de manera presencial. Una cifra que ya doblaba la de quienes en julio participaron en la votación para aprobar los nuevos estatutos. Pero todavía fue más inusitada la votación por correo: 570 papeletas. El hecho de tener que comprobar una por una la identidad de los remitentes y que estos no hubieran votado también en la sala llevó a un recuento más que lento, que se prolongo más de cinco horas. Esta meticulosidad era la prueba más fehaciente de que ambas candidaturas habían hecho una larga campaña soterrada de captación del voto por correo entre socios nada habituados a este tipo de contiendas electorales. El hecho de que cada socio hubiera recibido solamente una papeleta de cada candidatura tenía por objetivo que nadie hiciera copias. Quienes organizaron el escrutinio tenían preparado, sin que se supiera hasta entonces, un detector de tinta indeleble con el que se habían marcado todas las papeletas.

ANTIGUO 'CANTAIRE' / Pasadas las siete de la tarde, el presidente de la mesa electoral, Antoni Dalmau, dio la palabra a cada candidato durante diez minutos. Empezó por sorteo Enric Enrech, que mantuvo su línea de descalificación de la gestión de Carulla, sucesora de Fèlix Millet. Se postuló como antiguo cantaire y dispuesto a recuperar el protagonismo del Orfeó frente a la fundación y el consorcio. Llegó a pedir a Carulla que se retirara, anunció que despediría al director general, Joan Antoni Llinares -presente en la sala-, y mantuvo que ha habido muchas irregularidades en el proceso electoral. Un mitin de final de campaña más centrado en la denuncia del contrario que en pedir el voto a los presentes.

Carulla dedicó solo unos minutos a responder, molesta, las pullas y centró su discurso en hablar de superación de la etapa anterior sin citar a Millet, y el deseo de dedicarse solo a promover la música y la cultura. Como golpe de efecto introdujo un mensaje en vídeo de Antoni Ros Marbà, que ejercerá de responsable musical de la nueva junta.