Entrevista

Óscar Puente, ministro de Transportes y Movilidad Sostenible: "Somos el 'gobierno provisional' más duradero de toda la historia"

"Las autonomías se han convertido en entes que solo piden dinero a 'papá' Gobierno de España"

"No es ningún drama haber prorrogado los presupuestos de 2023; el país sigue creciendo y sigue funcionando"

Óscar Puente.

Óscar Puente. / Andrés Gutiérrez

Salvador Lachica

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

-Con la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat se da un paso más en la hoja de ruta diseñada por el presidente Pedro Sánchez para que el ‘procés’ pase a la historia, pero también supone que Junts deje en minoría al Gobierno. ¿Vamos a un escenario de elecciones anticipadas?

-Llevamos seis años, ya camino de siete, escuchando esa especulación. Somos el ‘gobierno provisional’ más duradero de toda la historia pese a que tras la moción de censura a Mariano Rajoy se dijo que íbamos a durar diez minutos. Sin embargo, se celebraron dos elecciones consecutivas en 2019, se ganaron ambas, se agotó esa legislatura y se volvieron a ganar las elecciones en 2023, pese a que Alberto Núñez Feijóo no lo quiera ver, porque hay una mayoría parlamentaria que está de acuerdo con que Pedro Sánchez sea presidente.

-Ya no. Junts no parece que esté en esa mayoría parlamentaria.

-¿Cómo que no? ¿Junts ha presentado una moción de censura? El día que eso pase, hablaremos de otro escenario, pero me cuesta mucho creer que vaya a presentar una moción de censura de la mano PP y de Vox. Me cuesta muchísimo creerlo. Junts nos ha apoyado en algunas cosas y en otras no, y eso es lo que va a seguir ocurriendo. Mientras tanto, seguiremos escuchando al PP que este gobierno acabará pasado mañana porque no puede gobernar. Pues no podrá gobernar, pero está haciendo crecer a este país al 2,5%, ha reducido el paro a niveles mínimos históricos, ha subido el Salario Mínimo Interprofesional y las pensiones más que ningún otro de la historia. ¡Menos mal que está acorralado! Yo quiero seguir así de acorralado los próximos tres años porque el gobierno no sé si estará acorralado, pero desde luego la clase trabajadora está cada vez menos acorralada gracias a este gobierno. Así que nosotros vamos a seguir defendiendo los intereses de los más desfavorecidos frente a los que creen que el poder les pertenece, que es patrimonio suyo y que nosotros estamos gobernando de prestado. Nosotros estamos ahí y vamos a estar hasta 2027 y ganaremos esas elecciones, porque este país no tiene alternativa, porque la derecha ha sido incapaz de configurar una alternativa al gobierno progresista de Pedro Sánchez, ya que lo de presentar un proyecto alternativo de país requiere un trabajo y una preparación que la derecha de este país no tiene.

-¿España está abocada, entonces, a tener unos presupuestos prorrogados hasta 2027?

-Lo ideal es tener unos nuevos presupuestos, pero no es ningún drama haber prorrogado los del año 2023. El país sigue creciendo, el país sigue funcionando. Yo hablo, por ejemplo, de mi ministerio. Tengo montante que me permite afrontar casi todos los compromisos pendientes en materia de infraestructuras y que permite invertir en aquellas necesidades que tiene nuestro país en este momento.

-Puede que no sea un drama prorrogarlos un año, pero sí tres.

-¿Estamos dando por hecho que no va a haber presupuestos? Vamos a ver, un presupuesto en todo caso es un desideratum porque lo que realmente importa es lo que se ejecuta, lo que se invierte de manera efectiva, de manera real. No digo que no sean importantes, pero lo verdaderamente relevante son las medidas que se toman los martes en el Consejo de Ministros, las decisiones que se van adoptando en el día a día y para eso estamos perfectamente articulados.

-¿El futuro sistema específico de financiación catalán rompe con la caja única y el principio de solidaridad?

-No rompe nada y es un acuerdo de mejora de la financiación de Cataluña. En todo caso creo que el debate sobre la financiación autonómica, en el que hay muchas aristas y muchos prismas, debe ser ya abordado. A mí me sorprende mucho que haya tanto presidente de comunidades autónomas del PP que se saca de encima la responsabilidad sobre los impuestos que recauda y que luego se queja de infrafinanciación. Fuí alcalde ocho años y en mi ciudad el ayuntamiento recauda el 40% de los recursos que administra, mientras que las comunidades autónomas recaudan el 5% de los recursos que administra. Eso convierte a las autonomías en entes administrativos que básicamente creen que su única función es pedir, reivindicar, pero luego eliminan impuestos como el del patrimonio o el de sucesiones y piden a ‘papá gobierno’ dinero de otras comunidades autónomas.

-¿Por qué cuando se fugó Luis Roldán dimitió Antoni Asunción como responsable de Interior y Grande-Marlaska sigue de ministro tras la segunda huída de Carles Puigdemont?

-En 1994, cuando se escapó el exdirector de la Guardia Civil, todas las competencias en materia de seguridad recaían sobre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado dependientes del Gobierno de España. Cuando ahora, en el año 2024, Puigdemont ha entrado y salido de un territorio concreto como es Cataluña todas las responsabilidades en materia de seguridad recaen en la Generalitat y en el cuerpo de Mossos d’Esquadra. No hay responsabilidad del ministerio, que incluso se brindó a colaborar y las autoridades catalanas contestaron que no era necesario.

-¿Sus críticas a la negativa del Tribunal Supremo de no amnistiar a Puigdemont no alimentan el discurso victimista del expresident?

-Es sorprendente cómo los matices han desaparecido del debate público. Que no esté de acuerdo con una resolución judicial no significa que apoye la posición de Junts, que es otra muy distinta a la mía. No he descalificado ni al TS ni a ni a ningún magistrado concreto. Lo que yo he hecho ha sido un análisis crítico de una resolución desde mi propia óptica de jurista que durante 20 años ha ejercido la abogacia. Yo ni he aludido al juez ni he aludido al tribunal ni les he criticado. Critico una resolución concreta y lo hago al amparo de argumentos jurídicos, porque se interpreta una ley que el legislador dejó clara y, además, de la forma más desfavorable para el reo, lo que contraviene aforismos jurídicos que tienen 2.000 años de historia, como son 'in claris non fit interpretatio' e 'in dubio pro reo'.

Suscríbete para seguir leyendo