Un cumpleaños feliz con excelentes vistas y curiosas ausencias

Vale, sí, las normativas están para cumplirlas, pero ya les digo que si Nueva York, París o Londres tuvieran un local tan espectacular como el Red Fish nunca lo cerrarían. Modificarían ligeramente la normativa anticuada y preestablecida y alardearían de tener el restaurante con las mejores vistas del mundo. Una gran ciudad no puede estar atada a una legislación caduca. En fin, que este jueves Roger Pallarols, el director general del Gremi de Restauració y uno de los tipos más estimados de la ciudad, celebró sus 45 cumpleaños en este único y exclusivo espacio junto a la playa. Y, como siempre, cuando Pallarols convoca, no falta nadie. Bueno, esta vez sí. Esta vez alguno de sus habituales miró hacia otro lado. Ni el alcalde Jaume Collboni, ni los tenientes de alcaldía Maria Eugenia Gay y Albert Batlle ni ningún mandamás del consistorio estuvieron a su lado. Pues eso, que las personas deberían estar por encima de las leyes.

No falló el presidente Artur Mas y su esposa Helena Rakosnik, recién llegados de ejercer de abuelos en Menorca. Vimos también al pintor y director de cine Albert Madaula, bien acompañado del que será la estrella del verano. Me refiero al periodista Pere Mas, el cual está en plena forma. Tanto es así que este verano sustituirá todas las tardes a Toni Clapés en RAC1. Tiene suerte Toni de ser el mejor y con diferencia, porque Mas es también muy bueno en esto de la radio.

La rumba de Barcelona

Entre bailoteo y bailoteo, gracias al fantástico grupo Rumba, me crucé con Eva Arderius, una de las periodistas que mejor conoce y explica, desde betevé, lo que ocurre en nuestra ciudad. Elegante como siempre, estaba a un paso de irse de vacaciones. Andará unos días por Platja d’Aro y alguna escapada más… Mientras, la incansable abogada Montse Pinyol, acababa de llegar de un juicio, también en las islas, no quiso perderse el fiestorro. Lucía esta vez un elegante sombrero blanco. No conozco a nadie que le queden mejor los sombreros que a 'la Pinyol'. Me crucé también con algunos colegas de profesión, bien acompañados, que evitaré descubrirles. Y es que lo que ocurre en el Red Fish se queda en el Red Fish…

El pastel del 45

En el escenario y antes de soplar las velas, Pallarols destacó la presencia del ahora tertuliano de éxito Javier Sardà. Explicó Roger que se conocieron gracias a Mercedes Milà. También citó, y le ayudaron a apagar las velas, Vicky Peña, Aitor Arrieta, Fede García, Isidre Gironés y el ‘Messi’ del Gremi, que no es otro que el madridista Dani García. Y Pallarols, que está en todo, aprovechó para pedir una calle para Montserrat Carulla y otra para Rosa María Sardà. Me hizo especial ilusión encontrarme de nuevo con la periodista y expolítica Rosa Alarcón o con Javier de las Muelas. No sabe pasar desapercibido el que fuera alcaldable del PP, Josep Bou, y saludamos a Antoni Espadaler, Joana Ortega y a la periodista Samanta Villar. A todo eso, el actor Josep Maria Pou observaba desde su altura el buen ambiente de la fiesta. Daniel Sirera volvió a demostrar que es el político con más sentido común del PP y, también, el más bailongo. Iceta se le queda corto…

Carlos Carrizosa, ahora sin la vara de mando de Cs, evidenció con su presencia que sigue existiendo. Algo similar al veterano socialista Josep Maria Sala y la política Anna Balletbò. Y quien existe, existirá y será recordado para bien, aunque abandone definitivamente la política la semana que vienes, es Xavier Trias. No asistió porque ya está instalado en Menorca. Vendrá la semana que viene, hará un ‘Que us bombin’ y empezará unas largas y merecidas vacaciones. No se perdió el sarao el director general de Intermedia, Albert Ortas, las estimadas abogadas Magda Oranich, Erika [siempre con ‘K’] Torregrossa y sus colegas de profesión José Maria Fuster-Fabra y Joan Manuel Trayter. Pues eso, que ni Luis Miguel que actuaba justo a la misma hora en el Palau Sant Jordi tuvo tanto poder de convocatoria como Roger Pallarols.

Dicho esto y contando de antemano con el permiso del director, Albert Sàez, uno se tomará unos días de asueto como cronista, que no como periodista deportivo. ¡Buen verano tengan ustedes!

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